La intendenta de la localidad santafesina de Carcarañá, Verónica Shuager, tomó la decisión por la falta de habilitación de las cabinas de la traza vial y los numerosos reclamos de automovilistas «por el pésimo estado de la ruta».
Luego de la gran cantidad de reclamos por el mal estado de la autopista Rosario-Córdoba, la Municipalidad de Carcarañá clausuró por tiempo indeterminado en el mediodía de este miércoles, el peaje Río Carcarañá, las barreras quedaron levantadas y los usuarios no abonan los 55 pesos de la tarifa.
Si bien Shuager explicó que la clausura se debe a la falta de habilitación de las cabinas de la empresa concesionaria, quien se hizo cargo en agosto pasado, señaló que la firma es «la principal responsable de esta situación al igual que Vialidad Nacional, que es quien debe hacerle cumplir sus obligaciones a la concesionaria».
La resolución de la intendenta de Carcarañá, Verónica Shuager, se registró luego de que gran cantidad de usuarios subieran a las redes sociales en los últimos días videos donde mostraban cómo llegaban al peaje y se negaban a pagar la tarifa debido al pésimo estado de la traza.
Los reclamos de los usuarios se hicieron escuchar y los videos comenzaron a aparecer en las redes mostrando el enojo de los automovilistas por el pésimo estado del pavimento y la gran cantidad de baches y pozos, lo que dificulta y pone en peligro la seguridad de los automovilistas.
A principio de este mes, incluso, la Defensoría del Pueblo de la Provincia solicitó a las autoridades de Vialidad Nacional y a los encargados de la empresa Corredor Panamericano II que tomen medidas para garantizar la seguridad vial en ese corredor, fundamentalmente en el tramo entre Carcarañá y Roldán. Sin embargo, los inconvenientes van mucho más allá de ese tramo.
Hoy, en tanto, Leandro Bond, titular del gremio de los trabajadores de peajes (Sutracovi), aseguró que se le pidió «a los trabajadores no confrontar con los usuarios porque en el tema de la ruta tienen razón los automovilistas», y añadió: «Desde la concesionaria nos dicen que están esperando los avales de Vialidad Nacional. Pero los usuarios tienen que padecer ahora el problema de cómo está la ruta y necesitan respuestas».
El pasado diciembre, en el Concejo de Cañada de Gómez se presentó un proyecto solicitando el no cobro del peaje por el estado tanto de la autopista como de la vía alternativa, la ruta 9, y el mantenimiento de esa medida hasta que no se concreten obras de reparación de la autopista.
Ayer, la titular del Concejo cañadense, Carina Mozzoni, dijo en el programa «Procopio 830», que se emite por La Ocho, que «el Concejo lleva como 20 reclamos, porque no sólo es el estado de la autopista desde la estación Río Carcarañá hasta Rosario, sino lo que es la ruta 9, desde Tortugas hasta Rosario. Es el camino alternativo que la concesión debe dar».
Mozzoni recordó que, tras la presentación del proyecto, «no hubo ninguna respuesta ni de la concesionaria vial, ni de las autoridades que deben estar ejerciendo el control de la concesión, ni del arco político respecto del arreglo de la calzada alternativa, es decir la ruta 9».
En tanto, el abogado Luis Rossini, letrado que inició una campaña para llevar a la Justicia el reclamo de los usuarios de la traza vial, señaló que, junto a un grupo de colegas, está juntando firmas para realizar una demanda legal que denuncie el pésimo estado de la autopista a Córdoba. A su vez, recomendó no abonar el peaje.
Hoy, la intendenta Shuager tomó cartas en el asunto y concurrió al peaje para colocar las fajas de clausura a las cabinas de peaje.
Fuente: La Capital.