Acompañado por Juan Balbín –presidente designado del INTA–, Mariano Bosch, vicepresidente del instituto, y Alejandro Ceccatto, presidente del Conicet, rubricaron el convenio para la creación de unidades de investigación de doble dependencia.

En el marco de una histórica trayectoria de cooperación, el INTA y el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) impulsaron la creación de Unidades Ejecutoras de doble dependencia, orientadas a profundizar la investigación, el desarrollo y la transferencia de tecnología. Acompañado por Juan Balbín –presidente designado del INTA–, Mariano Bosch, vicepresidente del INTA, y Alejandro Ceccatto, presidente del Conicet, rubricaron el convenio que pone en marcha esta iniciativa.

De esta manera, ambas instituciones del Sistema Científico y Tecnológico argentino acordaron avanzar en la construcción de una mayor integración bajo la modalidad de unidades compartidas para llevar a cabo acciones conjuntas en investigación, desarrollo y transferencia de tecnología.

Para Balbín, la misión institucional apunta a “tratar de alinear procesos y resolver problemas del país conjuntamente”. Se trata de “ver las sinergias y posibilidades que surgen gracias al trabajo en equipo; la modernidad pasa por ver dónde están las capacidades para resolver los desafíos que se presentan”, señaló.

En tanto, Bosch destacó que “es un orgullo impulsar proyectos de este tipo con una institución de excelencia como el Conicet”. “Necesitamos el acompañamiento de los investigadores, de las personas que están en los laboratorios y en el terreno para poder avanzar”, amplió el vicepresidente del INTA.

Por su parte, Ceccatto resaltó la importancia de la cooperación, debido a que “estamos frente a nuevos tiempos que exigen sinergia y trabajo conjunto”. “Es un hecho histórico que los dos organismos de Ciencia y Tecnología más grandes del país, con casi 60 décadas de vida, se asocien formalmente”, expresó.

Asimismo, explicó que “el Conicet es un organismo que produce conocimiento y el INTA resuelve necesidades de un sector específico”. “Esta asociación es un camino para darle mayor atención a las necesidades del país y ver qué cuestiones son estratégicas para la región”, indicó Ceccatto.

En el encuentro, también estuvo Agustín Campero, secretario de Articulación Científico Tecnológica del Ministerio de Ciencia y Tecnología, quien señaló que la firma del convenio entre el Conicet y el INTA “es un buen modelo para otras asociaciones, un camino posible y virtuoso para replicarse entre el Consejo y otras instituciones de ciencia y tecnología”.

Por último, Jorge Aguado, subsecretario de Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, celebró la cooperación entre ambos organismos y dijo que “gran parte de la política que venimos pregonando es el trabajo relacionado entre los distintos ministerios y entre los organismos de ciencia y tecnología”. “El objetivo es usar las capacidades que tienen todos para tener un mayor potencial”, aclaró.

Actualmente, se desempeñan más de 188 investigadores y 332 becarios doctorales del Conicet en el INTA. En este contexto, el año pasado rubricaron un convenio de becas cofinanciadas para formar recursos humanos de alto nivel en las dependencias del instituto, con énfasis en áreas de interés para el sector agropecuario.

Por el INTA, estuvieron presentes en la firma del convenio: Fernando Fernández, coordinador nacional de Investigación y Desarrollo; Ricardo Sager, gerente de Gestión de Desarrollo Científico y Tecnológico; Karina Trono, Oscar Ruiz, Elisa carrillo y Ruth Heinz, futuros directores de las unidades creadas.

En tanto, por el Conicet, participaron Mirtha Flawiá, vicepresidenta de Asuntos Científicos; Miguel Laborde, vicepresidente de Asuntos Tecnológicos; Carlos Van Gelderen, miembro del Directorio; Jorge Tezon, gerente de Desarrollo Científico y Tecnológico, entre otros funcionarios.