La tormenta de Santa Rosa pasó de largo por San Salvador, pero en la zona de la colonia San Ernesto, en nuestro departamento, un tremendo tornado, no dejó nada en pie en el galpón de Horacio Moix. Las imágenes son elocuentes del daño que provocó el fenómeno meteorológico.
“Lo que pasó es un tornado. Es una cosa inexplicable. No hay manera de encontrar argumentos de lo que hizo la tormenta”, empezó diciendo Horacio Moix en diálogo con LA SEMANA, quien perdió todo el esfuerzo de su trabajo de más de 35 años en unos pocos segundos.
“Era un galpón que tenía 160 metros de largo. Estaba bien de cortina, lo levantó, lo acható y lo tiró varios metros, muy lejos de adonde estaba. Es inexplicable”, destacó Moix.
El tornado se produjo a las 2,15 de la mañana del jueves y nos dejó sin nada, dijo. Ante lo vivido y tratando de encontrarle una explicación apuntó: “la naturaleza es sabia, pero tiene sus caprichos” y a mi me tocó la de los caprichos. Que va hacer. Contra la naturaleza no se puede. No he visto a nadie que pueda”, apuntó con un tono de angustia por el terrible daño que había sufrido.
Cuando sucedió el hecho estaba mi hijo en el lugar, porque acá en la zona cayó mucha piedra. Como había caído piedra se fue hasta el galpón a ver como estaban los pollos porque se asustan por el ruido que hacen sobre las chapas y cuando llegó el galpón había desaparecido.
Teníamos 16.000 y murieron prácticamente todo y se perdió todo. La empresa pierde y yo perdí el sacrificio de años en unos segundos, algo que no se espera, lamentablemente.
Trabajo para Noelma y vinieron a ver lo que había pasado. Me dijeron que nunca vieron una cosa así.
Al preguntarle cómo hará para levantarse dijo: “para levantarse ese va a hacer el tema. Tenemos un ofrecimiento de la empresa pero tenemos que estudiarlo y hablarlo bien con ellos”.
EN UN SEGUNDO PERDI TODO
Moix se dedicaba a la crianza de pollos “más o menos hace 35 años” respondió ante una pregunta de LA SEMANA y “siempre trabaje con Noelma. Empecé de cero, sin nada. Acá en la Colonia San Ernesto me inicie con 2.500 pollos y fuimos los primeros en criar pollos en la colonia, junto a Julio Derudder y Carlos Pralong, los tres que empezamos primeros”.
Para empezar “vendí un pedacito de campo, que lo arrendaba y me daba muy poco. Lo vendí y lo utilicé para hacer este galpón y el pollo me daba algo. Después saque un crédito en el banco Nación para terminarlo. Gracias a Dios deudas no tengo y en un segundo perdí todo”.
Sobre si hubo tormentas similares recordó que “hubo tormentas similares muy fuertes. Un chico Emanuel Heriger le arranco un galpón al dueño del almacén de chapa también. Incluso de la empresa Noelma que vinieron ayer nos decían que este es un lugar un poco viciado por el tema de las tormentas”.
Por último, don Horacio no quiso dejar de agradecer a los vecinos de la colonia que ayer vinieron y colaborar mucho para tratar de darnos una mano. Prácticamente todos los vecinos de la colonia se movilizaron y estos agradecidos porque en las malas están.
Fuente: Fernando Rodriguez / La Semana