El fin de semana último se conocieron dos hechos de inseguridad en San Salvador, que provocaron una nueva alarma y alerta a la comunidad. En uno de ellos el ladrón logró llevarse dinero en efectivo, y en el segundo caso no llegó a robarse nada porque fue sorprendido por la mujer. En ambos casos se trataría del mismo individuo.

En el primer hecho ocurrido en una vivienda ubicada sobre Presbítero Rausch, la mujer, encargada del área de Prensa del municipio de San Salvador, se vio sorprendida por el ladrón dentro de su casa, en momentos que tenía la billetera entre sus manos, listo para escapar.

 Precisamente, cuando estaba presta para darse una ducha, escuchó ruidos extraños en el comedor, hacia donde se dirigió y se encontró con el ladrón, a quien le preguntó ¿qué haces acá? El hombre rápidamente dejó la billetera y se dio a la fuga con gran rapidez, dando muestra de su habilidad para desaparecer de la escena del delito, como tantas veces lo habrá hecho, sin ser descubierto.

Rápidamente dio aviso a la Policía que se acercó hasta el lugar, pero no pudieron dar con el ladrón que se escapó por las viviendas del barrio. Luego de revisar la billetera y el lugar, la mujer admitió que el ladrón no se llevó nada porque no tuvo el tiempo necesario para perpetrar el robo.

El otro hecho lo padeció otra mujer, quien sufrió la sustracción de una suma de dinero que había obtenido con el trabajo del fin de semana.

En sus redes sociales, Cecilia expresó su angustia y detalló como fue el hecho:

“Que está pasando en mi querido San Salvador? Ya se terminó la tranquilidad. Subo al piso de arriba a bañar a mi hija de 5 años, y un dueño de lo ajeno entra con toda la impunidad a mi casa. Me abre la cartera, revisa todo y me roba todo lo que trabajé el fin de semana. Tanta tristeza e indignación. ¿Qué puedo hacer si la plata no tiene dueño, que tengo que hacer si lo encuentro adentro? ¿Alguien me dice? Bronca e impotencia”, es lo que sintió indicó.

Lo cierto es que el ladrón que podría ser el mismo en ambos casos, estaría relacionado con un conocido malhechor, que sería de apellido Palacio, pero la Policía aún no ha dado con su paradero ni lo ha podido encontrarlo con las manos en la masa.