Desde el PRO se oponen a que el Gobernador designe al diputado oficialista al frente del organismo de control. Lo acusan de haber “cajoneado” los pedidos de desafuero de Urribarri y Allende.
Conocidas las ternas para la presidencia y fiscalías contables del Tribunal de Cuentas, el PRO emitió un duro documento contra quien quedó en el primer lugar para presidir el organismo de control. Se trata del diputado provincial por el PJ, Diego Lara.
“Si Bordet elige a Lara se confirma que la transparencia no existe”. Es la frase con la que comienza la declaración, y afirma: “No puede ocupar el Tribunal de Cuentas, quien intencionalmente cajoneó los expedientes de desafuero de (Sergio) Urribarri y (José) Allende, colaborando para que uno de los mayores casos de corrupción quede impune”.
Desde el PRO se destacó que “el Tribunal de Cuentas es muy importante, ya que es el máximo organismo de contralor de lo que hacen los gobiernos con el dinero de los ciudadanos. No vamos a tener nunca institucionalidad en la provincia si Bordet no elige a una persona independiente e idónea para ese cargo”.
En segundo y tercer lugar de la terna quedaron el actual presidente interino, Federico Tomas; y Nanci Vinagre, también integrante del organismo.
Legisladores de ese partido habían advertido hace más de un año que “es inadmisible que se cambie el reglamento para los concursos en el Tribunal de Cuentas. En ese momento era una sospecha que lamentablemente hoy se confirma: hicieron todas las modificaciones para favorecer al diputado Lara, con un aparente concurso, que busca maquillar una decisión ya tomada”.
Hicieron mención, en rigor, a una reglamentación del Ministerio de Gobierno. A través del decreto 2.664, se modificó el régimen en el ítem “Antecedentes Profesionales”. Hasta ese momento, los candidatos debían presentar sus antecedentes en cargos públicos y en el ejercicio libre de la profesión. La norma actual incorporó una nueva clase: “antecedentes en el ejercicio de funciones inherentes al control y juzgamiento de funcionarios públicos, desarrolladas en organismo de naturaleza constitucional”. En el Tribunal de Cuentas lo decodificaron de la siguiente manera: la reforma está hecha para alguien que haya integrado un organismo de control o juzgamiento. Por ejemplo, el Jurado de Enjuiciamiento. O sea Lara.
El documento cierra de la siguiente manera: “Desde nuestro partido consideramos que, en el mundo del relato de la supuesta transparencia, en el que el estado provincial invierte millones, el Gobernador Bordet iba a usar esta oportunidad para que el Tribunal de Cuentas sea realmente un organismo de contralor. Pero el oficialismo tiene la capacidad de que cuando pensamos que ya no pueden caer más bajo, nos sorprenden y lo hacen”. Fuente: Página Política.