Se trata de la planta que maneja el grupo brasileño Minerva Foods en Venado Tuerto. En el lugar se intensificaron las tareas para lograr la reapertura en mayo
A poco más de siete años de su cierre, los planetas parecen alinearse para lograr la reapertura del frigorífico que la brasileña Minerva Foods controla en la localidad santafesina de Venado Tuerto. El cambio de políticas nacionales y la apertura de nuevos mercados para la carne argentina jugaron a favor para que se concrete una noticia con fuerte impacto en materia laboral.
Según diversas fuentes consultadas por Agrofy News, la planta reabrirá a finales de mayo habilitando el sector de despostada. Para julio, en tanto, se espera que comience a operar con toda su capacidad.
Si bien las buenas noticias que viene generando el sector frigorífico habían despertado a lo largo del año pasado varios rumores sobres el resurgimiento de la planta, la primera pista oficial se conoció en noviembre pasado, cuando el CEO del holding, Fernando Queiroz, expresó que “la empresa podría reabrir una segunda planta si Estados Unidos autoriza la importación de carne argentina”. El acuerdo con el país del norte llegó a los pocos días y operó como un acelerador para las gestiones que ya se habían iniciado.
Durante el verano se sucedieron diversas reuniones entre los jefes de Minerva Foods y distintas entidades interesadas en la reapertura (sindicato, municipio y organismos nacionales, entre otros), hasta que a mediados de marzo la firma notificó oficialmente al gremio el inicio de tareas de limpieza y reparación en el lugar. Sin embargo, los trabajos que hoy se están realizando van mucho más allá de eso e incluyen la reparación de motores, compresores, cañerías e infraestructura eléctrica.
La fecha que se maneja para levantar las persianas es finales de mayo. Se empezará primero con el área de despostada para luego ir paulatinamente avanzando hacia el resto de los sectores. Con todo, la fábrica estaría operando con toda su capacidad para julio. En el medio se realizarán las gestiones para lograr las habilitaciones para colocar mercadería en el mercado internacional, las cuales fueron cayendo por la inactividad de la planta.
Si bien llevó mucho tiempo sin operar, todos acuerdan que la fábrica se encuentra en buenas condiciones operativas, aunque resulta lógico que requiera una actualización. Así lo indicó el director regional del Senasa Cristian Cunha, quien estuvo siguiendo de cerca las gestiones: “Ellos tienen la habilitación convencional para el tránsito federal, pero el resto las irán tramitando paulatinamente. De todas formas no me queda dudas que no van a tener inconvenientes en lograrlas porque siempre mantuvieron la parte estructural”, señaló el funcionario, quien destacó las políticas nacionales que generaron un cambio de escenario favorable para la planta venadense.
Optimismo
“Hace años que venimos esperanzados”, comentó a este medio el secretario general del Sindicato de la Carne del departamento General López Cristian Crudelli, quien no oculta su expectativa por una noticia que podría generar entre 400 y 500 empleos de manera directa.
El representante gremial sostiene que el “impacto laboral va a ser muy grande, pero lo cierto es que también hay una necesidad muy grande de la gente”.