Desde el Ministerio de Salud se aseguró que los barbijos no llegaron a usarse. No estaban autorizados por Anmat.
A través de una disposición publicada este viernes en el Boletín Oficial, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) prohibió la comercialización de barbijos falsos que fueron adquiridos por el hospital de la Baxada, de Paraná, como elemento de protección ante la pandemia de coronavirus. Según el Ministerio de Salud de la Provincia, estos protectores no llegaron a utilizarse.
La Disposición 5596/2020 estableció la prohibición del “uso, la comercialización y la distribución en todo el territorio nacional, de todos los lotes del producto falsamente rotulado como: “BARBIJO QUIRURGICO TIPO 3 CLASE 2, BARBIJO TRICAPA CON TIRAS -DOC10- fabricado por LABORATORIO RODIMED de ASSI DIANA MARIA”.
Entre las razones expuestas en los considerandos se señaló que a una consulta realizada por el Hospital de la Baxada de Paraná, con relación a barbijos quirúrgicos presuntamente elaborados por la empresa RODIMED, a la cual agregó unas fotografías, hicieron sospechar de la legitimidad del producto.
Por su parte, la empresa informó que “se trata de un producto falsificado y que no fue fabricado por ellos, debido a que los barbijos originales que ellos fabrican vienen termosellados y poseen elásticos para su ajuste, mientras que el falsificado posee en las uniones costuras a máquina y tiras para atar y ajustar”.
Además, la compañía hizo hincapié en las diferencias que presentan ambas versiones: “El producto original detalla en su rotulado la siguiente información: Marca: RODIMED, Lote: tres dígitos, Vencimiento: cinco años, Denominación: Barbijo de uso único y Modelo: Barbijo triple con elástico (DBE); en cambio, el producto falsificado detalla en su rótulo la siguiente información: Marca: DOC10, Lote: diez dígitos, Vencimiento: tres años, Denominación: Barbijo quirúrgico tipo 3 clase 2 y Modelo: Barbijo tricapa con tiras”. A su vez, se remarcó que “el rótulo original posee un código de barras que el adulterado no contiene”.
Es por ello que la empresa sostuvo que “se trata de un producto falsificado, y que se desconoce su efectivo origen y composición, no pudiendo garantizarse su calidad, seguridad y eficacia, situación que resulta en un riesgo para la salud de la población”.
En consecuencia, “la Dirección de Evaluación y Gestión de Monitoreo de Productos para la Salud sugirió, a fin de proteger a eventuales adquirentes y usuarios de los productos falsificados involucrados, la prohibición de comercialización, uso y distribución de todos los lotes del producto con las características expuestas”.
La explicación de la Provincia
Durante la conferencia de prensa del mediodía fue consultado sobre el tema el director General de Emergencia Sanitaria del Ministerio de Salud, Lucas Kecher, quien aseguró que los barbijos en cuestión no llegaron a usarse, por lo cual no habrían representado un riesgo.
“Para tranquilidad de los entrerrianos, esos barbijos no estuvieron en uso”, dijo el funcionario. “En general, cuando se hacen las compras se comprueba por Anmat si los EPP (por los elementos de protección personal), en este caso los barbijos, son los que realmente se necesitan y se pueden usar. Al no remitirse por Anmat la autorización, estos barbijos no se utilizaron”, aseguró.
Agregó luego que “fue una compra privada que hizo el hospital Baxada” y que ante la ausencia del comprobante del organismo nacional y tras la confirmación de que no estaban autorizados, “esto no se usó”.