Otro caso de un preso vip conmueve por las características de lo acontecido. Mientras un montón de jubilados hacen horas de cola al rayo del sol en verano, con lluvia y frío en pleno invierno, acá se da un hecho singular que a un preso lo trasladaron desde Gualeguaychú a Concordia para que cobre sus haberes, con custodia especial para hacer el trámite primero en el municipio y posteriormente en un conocido banco de calle Mitre a pasos de Entre Ríos.
El Heraldo pudo tener acceso a un documento interno que especifica el pedido (bajo severa custodia) para el traslado y la custodia de dicho preso para que pueda ser traído hasta nuestra ciudad para el cobro de su dinero.
Se otorgó un pedido de traslado para el día de ayer 18 de julio para el preso Rubén Narváez, quien está imputado por “Supuesto homicidio simple en grado de tentativa”. El mencionado arribó a Concordia desde la unidad Penal N°9 –Granja “El Potrero” de Gualeguaychú.
De acuerdo a lo que se pudo saber el pedido del juez otorga a Rubén Narváez el permiso para ser trasladado y eso se hizo efectivo en el día de ayer 18 de julio hasta la municipalidad de Concordia desde la cárcel de Gualeguaychú, para percibir su “respectivo salario”, dice el parte.
Es sabido que un viaje desde dicha ciudad del sur entrerriano hasta Concordia es de aproximadamente 2 horas y treinta minutos con alrededor de 210 kilómetros para recorrer y un costo estimado de 4000 pesos, según fuentes confiables.
De este modo se viraliza nuevamente una prueba que indigna a la población. La semana pasada fue Kevin el interno en cuestión que cumpliendo prisión domiciliaria se le otorgó el permiso para asistir al “Club de Pesca”, hoy se llama Rubén y se lo imputa por supuesto homicidio simple en grado de tentativa y tiene el beneficio del traslado para cobrar sus haberes. Beneficio que otros ciudadanos de bien no cuentan y están expuestos como se mencionaba a largas colas y a las inclemencias del tiempo. No se pudo precisar cuál es el motivo por el que recibe un sueldo, subsidio o beneficio y es una de las tantas preguntas que se hace la comunidad. Fuente: El Heraldo.