Según una estimación de la Bolsa de Comercio de Rosario, en la campaña 2018/19 la producción agrícola demandó casi 2.200 millones de litros del combustible.
En 2019, el 64 por ciento de los dólares que ingresaron a la economía argentina por exportaciones, fueron aportados por el campo y la agroindustria. Solo la soja y el maíz, aportaron uno de cada cuatro billetes. Por eso, el agro es considerado uno de los motores de la economía de la Argentina.
Para encenderlo y movilizarlo, los productores derraman inversiones millonarias en el gasoil que se usa en la maquinaria agrícola y en los camiones.
Según una estimación de la Bolsa de Comercio de Rosario, en la campaña 2018/19 el consumo de gasoil de la producción agrícola argentina se ubicó en 2.195 millones de litros, a razón de seis millones de litros por día.
La cifra se divide en 920 millones de litros en tareas de siembra, cosecha, laboreo, movimientos internos y transporte de insumos; y en 1.275 millones para el traslado de los granos por camión y ferrocarril hasta acopios, industrias y puertos.
Tomando como parámetro el precio del gasoil en la localidad de Maciá (Entre Ríos), de 58,20 pesos (valor del 14 de enero pasado), representa un gasto total realizado por el agro de 128 mil millones de pesos o 2.135 millones de dólares, según el tipo de cambio comprador del Banco Nación.
Según la entidad rosarina, en comparación con la campaña 2017/18, cuando la cosecha estuvo afectada por la mayor sequía en 50 años, el consumo de gasoil creció 26,5 por ciento (había sido de 1.735 millones de litros) y la inversión ascendió 23 por ciento (había sido de 1.738 millones de dólares).