El responsable del Área de Cambio Climático explicó que tras un enero con lluvias récord, hay perspectivas de precipitaciones superiores a lo normal para el próximo trimestre. Rechazó pronósticos catastróficos y evalúo el tema residuos.
Luis Romero, geógrafo y observador meteorológico de superficie, es el director del Área de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente de la provincia del Chaco. En tal carácter, dijo a NORTE que la Provincia recomienda la población que no se deje llevar por los pronósticos “catastrofistas e irresponsables” como los emitidos por un empleado de una empresa privada que se viralizaron en la última semana.
“El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) es el único organismo oficial autorizado y con las herramientas técnicas suficientes como para elaborar pronósticos y tendencias y emitir alertas acerca de las condiciones por venir”, explicó Romero.
Perspectivas no son certezas
Al respecto, dio cuenta de que “el SMN trazó perspectivas de lluvias superiores a lo normal para febrero, marzo y abril”, lo que además puede estar influido porque “ se espera un evento del Niño tardío y débil”. Romero volvió a remarcar que “Se trata de una perspectiva. Quiere decir que nos habla de posibilidad, no de certeza, y mucho menos cuantificación”.
Por eso, el responsable del Área de Cambio Climático aclara que “Las perspectivas establecen las condiciones más probables para un periodo más o menos extenso, pero la evaluación de volúmenes e intensidades sólo puede hacerse sobre periodos breves, diarios o semanales, por ejemplo. Es decir que lo que efectivamente ocurra, sólo podrá calcularse a medida que el fenómeno se desarrolle. Nadie puede pronosticar científicamente que van a ocurrir catástrofes, y es una irresponsabilidad hacerlo”.
Prevención y conciencia
El Área de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente del Chaco tiene entre sus responsabilidades el desarrollo de acciones para mitigar al menos en parte el impacto de los fenómenos climáticos previstos.
“Todos los estudios sobre cambio climático nos indican que veremos en forma acentuada fenómenos cuya intensidad y frecuencia serán superiores a las habituales. Para enfrentar estas situaciones no sirve anunciar catástrofes y esparcir el miedo, sino trabajar en la prevención y en la concienciación de nuestra sociedad”, dice Romero.
Para ello, al Área de Cambio Climático trabaja en conjunto con los sectores productivos para desarrollar emprendimientos que se adapten a las posibilidades de sostenibilidad, difunde el conocimiento elaborado por los científicos acerca de las consecuencias previstas y probables del cambio climático, y asesora y desenvuelve planes de manejo de los residuos sólidos urbanos (RSU).
“En el sector productivo buscamos el desarrollo conjunto forestal y ganadero, porque el beneficio será doble o triple. Por ejemplo, alguien que foresta con algarrobos favorece al ganado, porque reduce el estrés térmico del animal, le quita presión al monte nativo, y permite la fijación vegetal del metano liberado por los animales”, detalla Romero, y agrega que este tipo de emprendimientos ya “se extiende por alrededor del 30% de la superficie dedicada a la actividad”.
Residuos urbanos
“En cuanto a los RSU, promovemos la acción conjunta de Provincia y municipios para el manejo responsable y eficiente”. Romero da cuenta de que en nuestra provincia “Tenemos 21 plantas de separación de residuos, en las que se recupera alrededor del 50% del volumen en materiales para reciclar. Esos materiales, cartón, PET, aluminio, vidrio, se venden a la industria, y el ingreso colabora con los presupuestos municipales. Estas plantas de separación han recuperado ya casi un millón de toneladas de reciclables”.
Energía
Otro factor de especial influencia en la mitigación del cambio climático es el uso eficiente de la energía. “Las emisiones de gases de efecto invernadero provienen en un 90% del sector productivo (principalmente la ganadería), y un 8% del uso de la energía eléctrica y su complemento, que en nuestra provincia es de combustión fósil en un 80%”.
Este desarrollo está en sus comienzos, en parte por la dificultad financiera para la inversión, en parte porque los costos que aún no alcanzan la relación necesaria con la producción, en parte por la ausencia de normativa específica para el volcado de la energía a la red y su distribución. Romero especifica que “se desarrolla un emprendimiento de captación de energía solar en el departamento Güemes, que se dedicará al abastecimiento local”.
Fuente: Diario Norte