Este miércoles falleció Orlis Joannas, a la edad de 83 años. Una persona que se distinguió por su sencillez y humildad. Su amor por Unión Fraternidad, al que vio nacer, lo llevó a trabajar y luchar junto a otros dirigentes que hicieron grande a la institución.
Las bochas se transformaron con el paso del tiempo, en su gran pasión, a partir de los colores de Unión y Fraternidad, siendo reconocido por su paso en el azulgrana, donde dejó una marca registrada.
También estuvo al frente del Comedor La Terminal durante muchos años, lugar de encuentro para recordar su paso por Unión, donde siempre tenía una anécdota y un recuerdo, gracias a su inefable memoria.
Uno de los momentos más importantes de su vida fue en oportunidad del cincuentenario de su querido Unión y Fraternidad, donde se le hizo un merecido reconocimiento imponiendo su nombre a la cancha de bochas de la institución.
EL DIA QUE ORLIS FUE RECONOCIDO POR TODOS LOS BOCHÓFILOS
En la noche del sábado 3 de abril de 2004, la Subcomisión de Bochas del Club Unión y Fraternidad tuvo a su cargo el acto mediante el cual procedió a denominar «Orlis María Joannas» a su cancha de bochas.
Del reconocimiento participaron numerosos dirigentes, simpatizantes y amantes de las bochas de distintas instituciones de la ciudad, que se reunieron para homenajear a un hombre que hizo cosas importantes por el club, reconocido en vida.
BIENVENIDA Y RECONOCIMIENTO
Ese día el presidente de la subcomisión de Bochas, José Luis Kloster, le dio la bienvenida.
Acto seguido, el presidente del Club, Rubén Rey, y el homenajeado, Orlis Joannas, descubrieron la placa colocada al ingreso de la cancha, ante el cerrado aplauso de todos los presentes y emotivas felicitaciones para Orlis.
VIO NACER Y CRECER A UNIÓN
Joannas pidió la palabra para decir que «esto no lo esperaba. Se lo agradezco de corazón a todos los que tuvieron esta decisión. No lo esperaba porque quizás hay muchos que se merecen esto», aclaró.
Recordó después que «por Unión he luchado prácticamente desde los comienzos porque lo vi nacer a Unión. Luché siempre, no digo debajo de este techo, pero sí desde el precario techo que teníamos en el cual tuvimos muchas satisfacciones, muchas alegrías. Debajo de ese techo pasé parte de mi vida y quizás también se criaron parte de mis hijos. Hoy tengo la satisfacción de verlos a ellos que todos luchan por los mismos colores, por los colores de Unión», indicó.
Orlis Joannas destacó después «un día que nunca me voy a olvidar: un triste 3 de noviembre de 1976 estando acá tomé la decisión de dejar Unión un tiempo”.
Estaba preparando una cena para el Club Sportivo y había quedado solo, me sentía cansado, tenía mis hijos chicos, me hice una cuadra y me fui hasta la casa de mi padre al mediodía. Le dije que vine de una disparada porque estoy preparando una cena para Sportivo. Y que andás haciendo, me pregunta. Le digo entonces que voy a dejar Unión. Qué estás diciendo, me dijo». Después de explicarle que no había tenido problemas con nadie y que estaba un poco cansado de estar solo le expresé: «Me quiero dedicar un poco a mis hijos», lo que fue aceptado por él.
«Lo único que me pidió es que no se fuera resentido y que algún día no venga a jugar a las bochas en contra de Unión. Sería muy triste para mí, me dijo. Y tenía razón. Lo mismo le digo hoy a mis hijos, a mi familia. Si algún día tienen que defender algún color, que sean los de Unión. Como creo que lo hacen hasta ahora, en las bochas, en el fútbol, en el ajedrez, en todos los deportes que ha tenido Unión», afirmó Orlis Joannas.
Después recordó que «bajo este precario techo coseché muchos amigos, tuve muchas satisfacciones. Tuve suerte de tener grandes compañeros al lado mío, he ganado muchos campeonatos, he perdido más, pero siempre siendo buen perdedor, que es importantísimo, es un consejo que me han dado y que hoy se lo digo a la gente joven».
ESTO ES UN SUEÑO
«Nosotros tuvimos una subcomisión donde trabajamos porque teníamos la ilusión de tener un techo así. El otro techo no iba más, era muy precario. Entonces se hicieron unas rifas. Con el primer dinero que obtuvimos resolvimos comprar las chapas. Sacamos precios de todos lados y compramos 1.970 pies de chapas y las dejamos al lado de la cancha de bochas hasta que la Comisión Directiva las ubicó. Todos me acompañaron en gran forma y no pudimos llegar a esto, pero después la directiva colaboró y se llegó», relató.
Para Orlis Joannas ver la cancha con su techo nuevo «era un sueño». Una noche se le acercó «don Lorenzo Camino, a quien le dije que me cuesta creer ver esto. Sí me dijo, a vos nomás te cuesta creerlo. Vos tal vez no perderías la esperanza, porque sos joven, pero yo que soy viejo no soñaba esto. Y si muero, muero contento. Ese era uno de los hombres que trabajaban», remarcó.
Inauguración del campo de juego “Florentino Joannas”. Guillermo Santos y Orlis Joannas proceden al izamiento de la bandera nacional en el acto cumplido en la cancha de Unión y Fraternidad.
En el fútbol de Unión, recordó Orlis, anduve prácticamente desde que se inició, cuando tenía la cancha enfrente de la actual sede. En esos tiempos «cerrábamos la cancha con bolsas, donde cocíamos bolsas hasta la 1 o 2 de la mañana en el fondo del bar San Martín, a veces comiendo una parrillada y trabajando, abriendo y cociendo bolsas, todo a pulmón, con sacrificio», concluyó.
Sus hijos le siguieron los pasos en la actividad deportiva defendiendo los colores de Unión e hicieron honor a las enseñanza y valores que les dejó un hombre simple, que vivió para su familia, para y por Unión y Fraternidad.