Minería y retenciones, una dupla que moviliza

Con el ejemplo de Mendoza, llegan las asambleas multisectoriales del agro. Un canal de expresión más integral y menos individualista.

PROTESTA. La nueva ley minera en Mendoza fue rechazada por el agro, vecinos y ambientalistas. (Gentileza Los Andes)

Mientras espera la respuesta del Gobierno nacional al pedido de dejar sin efecto el aumento de tres puntos porcentuales a las retenciones, el agro evalúa qué decisión tomar en el caso de que su pedido sea rechazado.

Si bien los dirigentes del sector saben que es un momento del partido en el que la pelota la tiene el presidente Alberto Fernández –quien se comprometió a analizar con el Ministerio de Economía el pedido de los productores–, cuando la reciban nuevamente y tengan la posibilidad de jugarla van a necesitar de una estrategia definida.

Por eso el nutrido calendario de asambleas de productores que durante los últimos días del año y comienzos del próximo se van a desarrollar a lo largo del país.

En esa oferta, hay para todos los gustos: desde reuniones informativas para precisar los términos de la negociación hasta “tractorazos” en una clara actitud de protesta y malestar, como el que se desarrolló en Bell Ville,  promovido por productores autoconvocados.

En muchos casos, las concentraciones no incluyen sólo al empresario agropecuario, sino que también son motivadas y sugeridas por otros actores de la economía con los cuales el agro tiene directa relación.

Más allá del agro

En Jesús María, por ejemplo, una asamblea multisectorial organizada el viernes pasado a las 19 buscó consensuar líneas de acción entre productores y cámaras industriales y comerciales de la zona.

El objetivo es estar preparados por si el Gobierno decide mantener el espíritu de la Ley de Solidaridad y Reactivación Productiva, que prevé entre otros reajustes llevar la retención de la soja al 33 por ciento, y al 15 por ciento las del trigo y el maíz.

Sucede que en ciudades y localidades ligadas en forma directa al ritmo de actividad del campo, cualquier perturbación en su negocio se traslada en forma directa a la economía doméstica.

En muchos lugares está fresco aún el recuerdo de las consecuencias del conflicto por las retenciones en 2008, cuando por ejemplo en el primer trimestre de 2009 las ventas de maquinaria agrícola retrocedieron 70 por ciento en relación con los primeros tres meses de 2008, antes del conflicto por la resolución 125.

El interior parece dispuesto a expresarse de manera más integral y menos individualista.

Las manifestaciones en tono de queja contra las decisiones oficiales adquirieron en los últimos días un formato más representativo.

 

El ejemplo cuyano

En Mendoza, vecinos, productores locales y ambientalistas marcharon todos juntos en contra de la modificación de una ley provincial que desde 2007 prohibía el uso de sustancias tóxicas en el sector minero.

Mientras a nivel de la cúpula de la Mesa de Enlace son más cautos a la hora de convocar a una protesta en el caso de que su pedido tenga una respuesta negativa, los productores presionan para que el malestar se exteriorice.

En el Gobierno, confían en poder ganar tiempo y negociar, si es que finalmente las retenciones aumentan tres puntos porcentuales, los términos de una compensación y segmentación del impuesto para los pequeños y medianos productores y para aquellos que se encuentren lejos de los puertos.

Ese paquete vendría además conformado por herramientas del Banco Nación para tratar las deudas de los productores y líneas de financiamiento (probablemente con tasas subsidiadas) para incentivar la inversión y la producción.

Esta instancia del partido se jugará en Buenos Aires (en las inmediaciones de la Casa Rosada), pero en el interior los productores quieren tener definida la táctica cuando la pelota esté en su campo. Fuente: Agrovoz.