En la jornada de este jueves estuvo en el gimnasio del Club Sportivo el entrenador de básquet Maximiliano Seigorman, nacido en San Salvador, y que actualmente trabaja para la Confederación Argentina de Básquet y es asistente de la selección mayor.
En diálogo EXCLUSIVO con LA SEMANA recordó sus primeros pasos en nuestra ciudad, su paso por Sportivo y la posibilidad que le dio el básquet de volver a visitar San Salvador.
“Viví hasta el 87 acá, así que contento de volver y ver tanta gente, que el básquet de Sportivo está creciendo bastante y eso me pone muy contento. Amigos, recuerdos, gente, años de escuela, mis padres siempre me recuerdan gente, empezó diciendo.
El básquet es una pasión, siempre me quise dedicar a esto, estudie educación física y después me dedique al básquet. Acá en Sportivo fueron mis inicios como jugador y de acá me fui a Paraná donde empecé mis capacitaciones y cursos para llegar al máximo nivel y hoy estar en las Selecciones Argentinas y trabajando para el básquet argentino que es algo que uno disfruta, es una pasión y un orgullo·, remarcó Seigorman
Al preguntarle por las sensaciones que vive en la selección Sub 18 y en la mayor, dijo: “Lo de las selecciones son lugares de paso que te lo prestan y hay que devolverlos mejor de lo que lo recibiste, Pero es un orgullo porque es lo que uno sueña, el desafío que uno tiene y trata de ir mejorando cada día las cosas, contento de ser parte y disfrutando de cada momento”.
Acerca del futuro del básquet argentino apuntó: “Este es un país que tiene chicos con mucho talento, pero para equipararnos con otros países necesitamos mejorar algunas cuestiones que tiene que ver con el fortalecimiento físico y el aspecto técnico. Son dos cosas fundamentales para poder trascender nuestras fronteras y que haya cada vez más chicos representándonos en el mejor nivel del básquet nacional e internacional. Argentina es cuna de muchos talentos y hay potencial para desarrollar más nuestros jugadores y es un desafío. Hay ganas de entrenar, estoy contento y con ganas de que se replique en más lugares”.
Para llegar a eso “Hay que planificar en el tiempo, tratar de ser paciente, los resultados no se producen de la noche a la mañana, estos son procesos de trabajo. Sabiendo para dónde va el básquet moderno, donde hay jugadores cada vez más atleta, jugadores con más desempeño técnico, me parece que por ese lado hay que tratar de llegarle a los chicos. Tratar de que cada club sepa que tener un profe no es un gasto sino una inversión, y que también hay que invertir en el aspecto técnico. Lleva tiempo pero va a decantar en mejores jugadores”.
Enseguida agregó: “Creo que eso es resultado de lo que se hace en cada lugar del país y por eso Argentina está bien representado a veces con buenos resultados, a veces no pero siempre siendo protagonista donde le toque participar”.
Al hacerle referencia al espejo de la selección dorada y al recambio que se da, además de lo que brinda cada club en su Liga, Seigorman coincidió en que “los ejemplos positivos, ejemplos de superación, eso contagia y para los chicos más chicos es fundamental tener esa vidriera”. Fernando Rodríguez
