Desde la entidad que agrupa a este sector señalaron que la restricción de las exportaciones perjudica a la población más vulnerable
Luego de conocerse la medida del Gobierno de restringir las exportaciones de carne en un 50 %, distintos actores de la cadena mostraron su rechazo. La Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA) manifestó su descontento y aseguró que esta medida deja el negocio en pocas manos.
“Volvemos a remarcar que el camino no es el cupo a las exportaciones de carne”, señalaron desde la entidad, que volvió a enfatizar en que son cortes que no se consumen en Argentina
Desde CAMyA denunciaron: “Las restricciones promueven la concentración de cortes a los grupos exportadores para la venta en grandes superficies, con el consiguiente monopolio del negocio”. En este sentido, remarcaron que se conseguirá la destrucción sistemática de los distintos oferentes, que hacen su faena para el consumo interno.
Por otra parte, describieron que representa una amenaza para las fuentes de trabajo vinculadas al consumo doméstico. En cuanto a los cortes a precios populares, la entidad manifestó que la población más vulnerable no se va a beneficiar.
“Las autoridades nacionales parecen no entender que el consumidor de menor poder adquisitivo no frecuenta las grandes cadenas para abastecerse. Con esta decisión, quedan fuera de juego tanto el argentino de menores recursos como los comerciantes de barrio. Con esta competencia, que roza lo desleal, deberán bajar sus persianas”, aclararon a través de un comunicado.
Por último, matarifes y abastecedores remarcaron que el camino es otro. “Queda en evidencia la falta de sensibilidad hacia el ciudadano a pie y el pequeño comerciante”, concluyeron.