Los dueños de yates, a la cabeza de los evasores en Concepción

El tema impositivo ha sido, desde siempre, foco de todo candidato que aspira a gobernar el país. Pero por alguna extraña razón (ligada fuertemente al poder de lobby y el financiamiento de la política) tarde o temprano las cosas siguen igual.
No es novedad que en Argentina los sectores de altos ingresos tienen un tratamiento impositivo privilegiado. La estructura impositiva del país tiene carácter regresivo, lo que hace que los que menos tienen paguen –en proporción– más impuestos que los sectores de altos ingresos. El IVA es el ejemplo más claro de los impuestos regresivos donde el desocupado paga la misma carga de impuestos sobre el pan y la leche que la lista de las 10 personas más ricas de la Argentina.
El problema se agrava cuando se constata que, además, esos sectores de altos ingresos ni siquiera pagan los impuestos que deben pagar. El caso de los Yates y embarcaciones es un claro ejemplo de esta situación.

6 de cada 10 no pagan

Según alertó la Administradora Tributaria de Entre Ríos (ATER) 6 de cada 10 embarcaciones no pagan sus impuestos a la Provincia. A raíz de esta situación, el equipo de Radio Franca entrevistó a Cristina Tanga, titular de la oficina de ATER Concepción del Uruguay quien ratificó la información y brindó varias precisiones respecto al elevado nivel de evasión entre los dueños de yates y embarcaciones.
“Estamos haciendo varios operativos de esta índole en Concepción donde se detecta muchísima falta de inscripción de embarcaciones que están amarradas en los clubes náuticos o guarderías de la ciudad”, advirtió la titular de la oficina de ATER en Concepción del Uruguay. Cristina Tanga también recordó que Concepción del Uruguay es el tercer parque náutico del país. Y en ese conglomerado de embarcaciones que pueblan las aguas de ríos y arroyos de la ciudad, de cada 100 embarcaciones que están amarradas en los nutridos clubes náuticos de Concepción del Uruguay, 60 de ellos no pagan sus impuestos provinciales.

¿Qué impuesto paga una embarcación?

Todas las embarcaciones pagan un impuesto que se abona una vez al año en el mes de noviembre. Las únicas que están exentas son aquellas que tienen un valor inferior a 10.000 pesos. Respecto al monto que se paga por cada embarcación, Cristina Tanga explicó que “Hay una escala de alícuotas según el valor de la embarcación y en función de eso es el monto que debe pagar a la Provincia cada titular”. Un Yate, una lancha o un velero pagan valores y porcentajes diferentes. El monto se desprende de un porcentaje del valor declarado de la embarcación.
Para fines de mayo de este año, las estimaciones de la Administradora Tributaria de Entre Ríos alcanzaban a unos $40.000.000 que no se recaudan por la falta de inscripción de los yates, veleros y otras embarcaciones de valor en la Provincia.

Un Estado ineficiente

A nadie escapa que Entre Ríos atraviesa dificultades financieras y económicas importantes. Sin embargo, mientras la presión tributaria aumenta sobre los que sí pagan sus impuestos de forma regular, al Estado entrerriano se le escapan delante de la cara centenares de embarcaciones que desde hace años no aportan los pagos correspondientes. Este nivel de ineficiencia intenta ser corregido imponiendo un efecto retroactivo a los impuestos que el mismo Estado no pudo cobrar. Es decir, aquel que tiene un yate desde 2006 en adelante, deberá pagar los impuestos y los intereses correspondientes de forma retroactiva al año en que compró la embarcación.

La situación es simple de abordar y fuera de micrófono desde ATER confiesan que es tan simple como “cazar en el zoológico”: alcanza con acercarse con el listado de embarcaciones inscriptas en ATER en una mano y recorrer las cuatro guarderías náuticas de la ciudad para registrar las matrículas de las embarcaciones que no están inscriptas y que por tanto no pagan sus impuestos. En los informes públicos sobre Recaudación que difunde ATER en su sitio web no está discriminado cuánto recaudan anualmente por el impuesto que se cobra a las embarcaciones, probablemente para no pasar vergüenza por la ínfima suma que recaudan.
Los controles cruzados con Prefectura Naval Argentina prometen complicar la posibilidad de uso de las embarcaciones para todo aquel que intente salir a navegar y no tenga al día su impuesto provincial correspondiente.

Y los que pagan…

Pero el problema con los dueños de los yates y embarcaciones de lujo no termina ahí. Desde la entidad recaudadora entrerriana reconocen que, incluso en esos 4 de cada 10 embarcaciones que pagan, también hay irregularidades. La titular de ATER Concepción del Uruguay alertó en Radio Franca que “también ocurre que muchas de las embarcaciones que se dan de alta tienen una tasación muy menor al valor real. Y también notamos que los valores que se manejan en las transferencias (cuando se vende una embarcación) son irrisorias”, señaló Cristina Tanga. La funcionaria adelantó que para contrarrestar estas maniobras, desde el organismo “vamos a efectuar controles cruzados para contrarrestar la declaración jurada que hace el propietario” que declara muy por debajo del valor real. Pero eso va a ocurrir, con suerte, el año que viene….
Mientras tanto, el gran peso de los impuestos recae sobre los contribuyentes de siempre que regularmente pagan sus obligaciones en Entre Ríos. Parece haber llegado el momento de revertir este estado de cosas, premiando a los que pagan y poniendo el esfuerzo de las políticas públicas en detectar a los infractores. Adrián Pino – El Entre Ríos