Lo asaltaron a mano armada y se llevaron dinero en efectivo y un celular

Un comerciante de San Salvador que se dedica a la compra/venta de cartón, hierro, metales y vidrio, fue asaltado a mano armada en la madrugada del domingo, llevándose los delincuentes una importante suma de dinero, estimada en $ 280.000 y un celular. Le apuntaron en todo momento con un arma en la cabeza, mientras su esposa y un bebé estaban en una pieza.

El hecho se registró a la 1 del domingo, en la Avenida La Paz, enfrente al Cementerio Israelita, donde está la empresa Reciclados Maxi.

Los delincuentes al llegar al lugar se anunciaron golpeando la ventana de la vivienda del titular de la firma comercial, quien -en diálogo con FM Imágenes- comentó que “como el pueblo es tranquilo salí a ver quién era. Mediamos unas palabras con el primer individuo que tenía la cara descubierta y decía que era de Santa Fe. Luego salgo afuera para hablar con otra persona que estaba detrás del muro, porque llegaron con la excusa que me iban a prender fuego el cartón que tenía”.

“Una vez que salgo me encuentro con la otra persona que estaba con una remera en la cabeza y sale con el arma. Cuando retrocedo el otro también saca un arma y me meten adentro de mi casa”, relató.

“Las armas eran parecidas a las que usa la Policía, agregó. Me hicieron sentar en el sofá y el que tenía la cara cubierta me apuntaba con el arma en la cabeza y el otro me pedía la plata. En ese momento, mi señora que estaba en la habitación, con la nena de 4 meses, le manda un mensaje a un amigo. Les decía que no entren a la pieza porque ahí no había nada”, expresó Maximiliano.

Cuando les muestro donde estaba la plata, salieron y se pusieron nerviosos porque no sabían que hacer. Enseguida me tiran al piso con el arma en la cabeza. Ahí es cuando sale mi señora llorando pidiendo por favor que no me hagan nada. Antes me habían quitado el teléfono y se fueron cerrando con llave la puerta de afuera, agregó.

Uno de los ladrones era mayor, de unos 38 años, y otro más delgado y más chico.

Conmigo laburan varias personas y a veces me vienen a pedir un adelanto porque luego les voy a buscar la mercadería.

La Policía llegó rápidamente al lugar, pero los ladrones alcanzaron a escapar, aparentemente sin dejar rastros, en un automóvil.