La diferencia entre los valores de la hacienda y del producto al consumidor llegó al 18%, tres puntos más que el máximo de 2018. Se espera una menor oferta en las próximas semanas, pero las subas tendrían un tope por la imposibilidad de trasladarlas al mostrador.
La semana pasada, las cotizaciones de machos y de livianos comercializados en el mercado de Liniers aumentaron entre 1 y 4% con respecto a la previa, sin cambios en vacas.
La firmeza de la demanda se sostuvo pese a que, tras los faltantes de las semanas de Navidad y de Año Nuevo, sucedieron dos semanas con 20-25% de incremento en las entradas sobre el promedio de un año.
Tampoco hizo mella la brecha de índices de valores entre la hacienda y la venta de carne al público. La semana pasada se llegó a 18%, superior al 15% registrado a fines de agosto, que había sido el valor máximo de 2018. Esa es la diferencia que el sector comercial (frigoríficos consumeros, matarifes y supermercados y carnicerías) tiene que recortar, sea con mayores precios al público –lo que luce bastante improbable en estas circunstancias- o con menores precios para la hacienda.
En la comparación con los valores de hace 30, 60 y 90 días, los machos y livianos se encuentran entre 11 y 18% por arriba, dependiendo de la categoría y la fecha de cotejo. Las vacas muestran una reacción de +26% en un mes y más modestos 10 y 15% para los plazos más alejados.
El valor real sigue para arriba
El precio deflacionado del novillo de consumo se ubica 7% por arriba de la trayectoria del promedio móvil de 52 semanas y 19% más alto que el valor de hace un año.
Las lluvias recientes han creado problemas en el abastecimiento corriente de hacienda, colaborando con el desbalance entre oferta y demanda.
Hay quienes prevén que en las próximas semanas se notará la falta de oferta de animales livianos de feedlot, como resultado del alto precio del maíz que llevó a una menor actividad en el encierre.
Sin embargo, creemos que será mayor la presión descendente en las cotizaciones de la hacienda, por la falta de respuesta esperable en el consumo.