En el Departamento Villaguay (E.Rios) en la zona rural de Raíces Oeste, la ruta 18 Km 116, con el cruce del camino que va al pueblo de María Grande, este paraje hoy es conocido como “La Turca María”.

En ese lugar todavía existen partes de caseríos asentados en barro, de un antiguo almacén de Ramos Generales.

A poco de andar llego hasta una carnicería y bar que se alla enfrente, cruzando la ruta 18, le habían puesto el nombre “La Turca María” saludo a los parroquianos allí presentes y pregunté si algún vecino me podría dar informes sobre La Turca Maria.

Un paisano que estaba allí en silencio señala la esquina del mostrador, en ese rincón encontraba apoyado un hombre de unos 87 años, me acerco al anciano y le pregunto si conoció a la “Turca María”, y este me contesta… extendiéndome su mano “- Pero mi amigo como no la voy a conocer si yo soy el hijo de ella, me llamo Gabriel Chahá,”

De inmediato busquamos un lugar apropiado para conversar y que me cuente las vivencias de su madre.

Allí comienza un dialogo del cual se desprende una breve historia de esa mujer casi leyenda de nuestra zona

Gabriel Chahá, me contaba que el verdadero nombre de su madre era Marián Jacobo, que había nacido allá por el año 1887 en el pueblo de Sergaia, República Árabe de Siria. Emigró a la Argentina mas o menos por año 1890, huyendo como otros tantos paisanos sirios y libaneses de la opresión otomana.

Ella ya estaba casada con Amado Chahá, su padre Era un hombre de perfil bajo, bonachón, de pocas palabras. pero Doña Márian Jacobo era todo lo contrario, ella era distinta, viváz, inquieta y decidida

Era .prima del comerciante don Ralli Jacobo, que también era inmigrante árabe sirio, dueño de un comercio de Ramos Generales en las calles Colon y Rivadavia.

Me contaba Gabriel que su madre con su padre después de un largo y cansador viaje llegan a Villaguay para quedarse a vivir, por lo que adquieren una casa e instalan un comercio de verdulería y frutería en la calle Passo, frente a la casa de un Escribano de apellido García.

Doña Márian Jacobo era una mujer respetada, de buen corazón, ayudaba a la gente necesitada, pero cuando alguien quería abusar de su bondad , o se burlaban por su forma de hablar reaccionaba con energía y no dejaba que le falten el respeto

Por eso ante el carácter de esta mujer, se ganó un dicho muy conocido en esa época, hasta nuestros días, y que dice: “No hay hombre mas feo que Florencio Garcia, ni mujer mas brava que la Turca María”

Ya en el año 1921, en ocasión que realiza una visita a la casa de unos paisanos árabes por los pagos de Mojones Sur, le interesa la zona, entonces decide instalar un almacén de Ramos Generales, compra un predio donde funcionaba la antigua escuela Nº 21, y funda el almacén. Tuvo que pasar épocas bravas por ser esa una zona rural donde en esos años había hombres de todas las costumbres, gente bravía, la mayoría analfabetos, peones de estancias, troperos y menchos golondrinas.

Al tomar algunas copas demás, no hacia mucha falta un malentendido para convidarse a pelear, allí poncho y cuchillos en manos salían afuera para entreverarse en peleas.Entonces ella entraba en acción y se hacia conocer. “la Turca María” sin miedo y demostrando gran coraje se entreveraba en medio de la contienda, revolver en mano les gritaba “ Parensen carajo..! yo soy la Turca Maria y a mi me van a respetar” separándolos y terminando con los pleitos que allí nacían por cuestiones del momento nada más .

Gabriel Chahá, su hijo me contaba “Cuando yo era gurí, si habré llorado por que mi madre se metía a separar contiendas y peleas, por que tenía miedo que le pasara algo, pero gracias a Dios, nunca le pasó nada” Recordaba que su madre solía vestir de botas, un amplio vestido debajo de las rodillas, pañuelo en la cabeza y un delantal a pintitas con dos grandes bolsillos en la parte delantera.

En uno de ellos portaba en ocasiones un arma, es que por esos lugares de montes y soledad, era la única manera de hacerse respetar y defender su familia y a sus vienes.

Allá por el año 1947, hace una visita a gente amiga en la zona rural de Raíces Oeste, por lo que en el año 1948, vende todo lo que tenía en los pagos de Mojones Sur, mas un campo con algunas haciendas y adquiere un pedazo de tierra en la Ruta 18 y el caminoReal y funda el comercio de Ramos Generales bautizándolo con el nombre “Almacén de Ramos Generales “ La Turca María”

Contaba don Gabriel que a su madre era solicitada por apurados maridos para que ella oficiara de comadrona “partera” , así ayudó a traer al mundo a muchos gurises, así fue su vida , haciendo favores y gauchadas ayudando a la gente sin cobrar dinero alguno

Por causas naturales fallece su marido don Amado Chahá, al quedar viuda su hijo Gabriel queda a su lado, acompañándola, así pasaron los años, ella siempre al servicio del necesitado.

Don Gabriel recuerda que en esos años la Ruta 18 que va desde la Ciudad de Paraná pasando por Villaguay, tenía tramos de ripio y de tierra, por lo que en días de lluvias transitarla era realmente imposible.

Por ese entonces el único medio de transporte de pasajeros era una empresa de colectivos “El Montaráz”, cuando eran épocas de lluvias los transportes quedaban empantanados y había que sacarlos con tractores o caballos con arneses especiales

Los pasajeros de esos vehículos se quedaban pernoctando en los ranchos de La Turca Maria, hasta que los caminos nuevamente se podían transitar.

Doña Márian Jacobo no les cobraba dinero alguno por la estadía, la gente quedaba agradecida por tanta amabilidad y hospitalidad de esta buena mujer.

Y así fueron pasando los años, los que fueron mellando poco a poco su existencia, ya muy anciana y con una grave enfermedad de la vejez, su salud comienza a declinar, siendo internada en el hospital Santa Rosa de Villaguay, lugar donde fallece el 7 de octubre de 1972, a la edad de 95 años.

..Y así termina una de la tantas historias perdidas de nuestro Villaguay antiguo, una familia de inmigrantes árabes que llegaron a nuestra patria en busca de paz, tranquilidad, progreso y un futuro mejor.-

Acoto que no se quien es el autor de este relato .Lo tengo archivado desde hace mucho en mi computador, pero lo comparto para que nuestras pequeñas historias pueblerinas, alimenten nuestra historia y la historia de los que nos siguen.

Fuente: RAÚL JUAN JOSÉ ÁLVAREZ

Edición y arreglos Pueblos y Leyendas de Entre Ríos.