Desde la Parroquia Santa teresita se dio a conocer una circular emitida desde la Diócesis de Concordia, firmada por el Obispa Luis Collazoul.
Estimados presbíteros y diáconos de la Diócesis de Concordia
Atendiendo a las medidas preventivas decretadas el 19 de marzo por el Poder Ejecutivo Nacional a raíz de la situación sanitaria generada por la propagación del virus Covid-19, y teniendo en cuenta las acciones que ya veníamos realizando en nuestras comunidades eclesiales, como así también las que se están llevando adelante por los distintos actores sociales, principalmente las que con decidido esfuerzo realizan los agentes del ámbito de la salud, expreso algunas medidas que, manteniendo otras anteriores (Diocesanas, 14.03.2020; Región Litoral, 17.03.2020), las completan o modifican en lo que sigue.
– Se suspenden las celebraciones de la Santa Misa y otros Sacramentos con asistencia de fieles en todas las parroquias, iglesias y capillas, con la consiguiente dispensa a los fieles en la diócesis de Concordia de la obligación del cumplimiento del precepto dominical. Se recomendará a los fieles realizar las prácticas de devoción a su alcance, preferentemente en familia y con las lecturas de la Palabra de Dios correspondientes al día, para vivir así el Día del Señor.
– Procurar la transmisión de la Santa Misa en los domingos y solemnidades por los Medios de Comunicación locales, televisivos, radiales y de plataformas digitales, de modo que los fieles puedan unirse a ella desde sus hogares. Para esto se realizarán con el mínimo de fieles necesarios para una celebración digna: lectores, acólitos, guía, cantores y personal técnico únicamente. Se harán respetando estrictamente todas las medidas sanitarias dispuestas por las autoridades o indicadas por las organizaciones sanitarias, particularmente las de higiene personal y ambiental, ventilación y distancia entre los participantes.
– En la circunstancia de que un Bautismo no pueda ser diferido, por ejemplo, en razón de la salud del niño, el ministro mantenga la oportuna distancia del bautizando y de los padres y padrinos (sean éstos los únicos participantes de la celebración). Pueden omitirse la signación de la cruz en la frente y el rito del Efetá. Prever de higienizar el pulgar con alcohol previamente a las unciones. En casos de particular urgencia, considerar la posibilidad de utilizar el rito abreviado.
– Para administrar el sacramento de la Reconciliación, procúrese un lugar de culto amplio y aireado, pero que garantice la debida reserva, y conservando con el penitente la distancia recomendada por los protocolos establecidos.
– En la visita a enfermos y ancianos para la administración de la Reconciliación, de la Comunión o de la Unción de los Enfermos, se deberán extremar las medidas de prevención, de modo de cuidar a los mismos, que son de alto riesgo de contagio, pero también para prevenir una eventual infección del ministro de los sacramentos. Instrúyase convenientemente a los ministros extraordinarios de la Comunión, aún con el dolor de tener que evitar este servicio de misericordia cuando no haya posibilidad de los resguardos convenientes. De ordinario, debe aconsejarse esto último.
– Seguirán suspendidos los encuentros de catequesis, de asociaciones y demás reuniones pastorales, y toda actividad con participación masiva de fieles.
Estas disposiciones estarán vigentes hasta el próximo 31 de marzo, pudiendo ser modificadas o prorrogadas, conforme a la evolución de la situación sanitaria y a las medidas de la Autoridades competentes.
Ruego a ustedes, presbíteros y diáconos, hermanos en el Ministerio Pastoral que nos confió Jesús, mantener nuestra disponibilidad ferviente para acompañar las necesidades espirituales y materiales de nuestros hermanos en esta hora difícil. Les pido también dar a conocer ampliamente entre los fieles estas disposiciones.
Elevemos nuestra plegaria implorando el auxilio de Dios. Pidamos a los fieles recen con fervor en sus oraciones particulares, familiares y grupales. Invitemos a los hermanos creyentes de otras confesiones religiosas a que nos unamos todos en una gran comunión de oración.
Invocando la protección materna de María Santísima, Salud de los Enfermos, saludo a ustedes implorando la bendición del Señor.
Concordia, 20 de marzo de 2020
LUIS ARMANDO COLLAZOUL
Obispo de la Ciudad de Concordia