Este domingo 9 de mayo se cumplen 50 años de la inauguración del Templo de la Iglesia Luterana de San Salvador, que producto de la situación de pandemia no se puede celebrar, pero si recordar, como lo hacemos en esta nota de LA SEMANA actualizada por Fernando Bordet, integrante de la Parroquia San Salvador
A 50 AÑOS DE UN HECHO HISTORICO
El domingo 9 de mayo de 2021, es el cumpleaños del templo, como es una ceremonia especial no solo para la Parroquia San Salvador, sino para la historia de la Iglesia Luterana Argentina. Se decide postergar tan importante celebración para meses más cálidos y en espera de que la situación epidemiológica mejore o en el mejor de los casos llegue a su fin. Entendemos que este no es el tiempo de celebraciones. Los tiempos de Dios son perfectos y a veces no coindicen con los nuestros.
Las primeras reuniones de adoración se realizaban en casas de familia, comenzando en 1917 en Colonia Santa Margarita. Debido a que la mayoría de los colonos eran arrendatarios, el lugar de adoración cambiaba con las migraciones de los feligreses por la zona. Durante la presidencia del pastor Samuel H. Beckmann en San Salvador, es probable que los cultos se hayan realizado en un lugar alquilado del cual no tenemos información.
Cuando el pastor Martín Haack mudó su residencia a Chañar, es posible que las reuniones se hayan vuelto a realizar en casas de familia. Hacia 1951 y hasta 1970 las reuniones se realizaban en la casa de la familia de Enrique Fritzler en el ejido de San Salvador. Quienes participaban de estos cultos, recuerdan la humildad y hospitalidad de esta familia, el lugar donde cada uno solía ubicarse e incluso estacionarse en el patio. Como lo indicaban las costumbres, los varones se sentaban de un lado y las mujeres del otro; el pastor predicaba cerca de la ventana por la escasez de luz en la habitación. Los varones vestían de riguroso traje y corbata.
En el año 1968 la Sra. Luisa Hill de Hill donó un terreno para la construcción del templo. Se comenzó con la edificación el 04 de Julio de 1969. Para ello se buscó el apoyo de todos los miembros de la parroquia, y de las parroquias luteranas establecidas en la provincia de Entre Ríos. El pastor Gustavo Bär, junto a Luisa Hill de Hill y Luisa Fritzler de Moix, visitaron especialmente las parroquias de Basavilbaso, Villaguay, Aldea San Juan, Urdinarrain y Gral. Almada para buscar su apoyo y colaboración. La IELA (Iglesia Evangélica Luterana Argentina) participó otorgando un préstamo del Fondo de Edificación de la IELA por un término de tres años. También se invitó por carta a todas las parroquias de la IELA a participar con sus ofrendas, para lo cual muchas se hicieron eco.
El 10 de agosto de 1969 fue colocada la piedra fundamental para la construcción del templo. En ella se depositaron una Biblia, un Catecismo Menor del Dr. Martín Lutero, los Estatutos de la Iglesia Nacional, un diario nacional, uno provincial y uno local del día en cuestión; un pergamino con el nombre de las autoridades nacionales y eclesiásticas de ese tiempo y un pergamino conteniendo la firma de los miembros de la parroquia.
La Comisión conformada para la edificación del templo estaba integrada por los señores Jacobo Hill, Adán J. Hill, Juan Hildt, Federico Fritzler, Jorge Heer, Julio Hill y Enrique Sack. A nivel local, el Pastor con el Sr. Federico Fritzler, visitaron a los miembros de la parroquia quienes donaron arroz, pollos, dinero y otras especias para hacer frente a los gastos que demandaba esta obra. La construcción fue realizada por Don Juan Nutz, quien finalmente donó la mano de obra correspondiente a la vereda del templo.
El templo fue dedicado el domingo 9 de mayo de 1971. En dicha ceremonia ofició como Liturgo el Pastor Gustavo Bär y predicó el Pastor Ernesto Weigandt. En el culto que se celebró por la tarde, predicó el Pastor Roberto Kroeger y ofició la liturgia el Pastor Gustavo Dirr. Ese día se realizó un almuerzo en el Club Sportivo del cual participó una numerosa concurrencia.
Posteriormente a su inauguración, se colocó el cielorraso que se concretó gracias a una donación de Don Jacobo Hill. Ese mismo año se encargaron 20 bancos de pino brasil en una carpintería de Villaguay, a los que luego se agregaron 6 más confeccionados por Alfredo Fink. El armonio fue adquirido el 17 de mayo de 1971 y en el año 1982 fue cambiado por un órgano eléctrico. El altar, el púlpito, el leccionario y la pila bautismal fueron encargados en Villaguay por la Liga de damas Dorcas.
El 14 de Julio de 1972 la IELA condonó parte de la deuda que la congregación tenía aún con el Fondo de Edificación.
Cuando una tormenta hizo caer la cruz del templo, el Sr. Alfredo Fink y el pastor Gustavo Bär hicieron una cruz de metal que fue revocada por los hermanos Fritzler y finalmente colocada en el año 1978. El 26 de junio de 1979 se colocó una réplica de la pintura del Cristo Crucificado de Velázquez detrás del altar, donada por la Sra. Ana María Nickstadt residente en Alvear (Corrientes). El 26 de noviembre de 1981 se adquirió la Biblia para Púlpito. Las damas donaron los elementos para la Santa Cena como también la alfombra que engalana cada celebración. Fueron las damas las que hicieron confeccionar los paramentos para cada tiempo del Calendario Litúrgico, manteles y paños sacramentales, ellas los mantienen y renuevan de acuerdo a las necesidades. En el año 1992 llegó el pavimento. En el año 1996 se colocaron los ventiladores y las nuevas luminarias. La mano de obra fue donada por Maximiliano Müller. En el año 2003, gracias a la donación y a la colaboración de los miembros, se instaló la calefacción y el gas natural.
El 8 de mayo de 2011, con motivo de los 40 años del templo se realizó una celebración especial y se pintó el templo con los colores que exhibe en la actualidad, gracias al trabajo de Julio Migueles y Fernando Bordet. En la celebración oficio el Pastor Omar Weber y como Liturgo el Pastor Gustavo Bär. Frente al templo se descubrió una placa conmemorativa con el texto de 1º Reyes 8:29 “Que estén tus ojos abiertos de día y de noche sobre esta casa”. En el descubrimiento participaron Luisa Hill, quien donó el terreno para el templo, el presidente de la congregación Cesar Mohr y el pastor Gustavo Bär. Luego se realizó un almuerzo en el patio destinado al Colegio Luterano, donde se entregó recordatorios a las diferentes familias. Para esa ocasión se preparó una muestra histórica en el salón parroquial y se organizó un concurso abierto de maquetas de la iglesia realizadas por los chicos.
El 27 de julio del 2017 se cumplieron 100 años de la congregación. En dicha ceremonia ofició como Liturgo el Pastor Omar Weber y predicó el Presidente de la IELA Pastor Carlos Nagel. Ayudaron en la ceremonia de Santa Cena los Pastores Silvio Donat y Nestor Maili. Para esa celebración se realizó el esgrafiado de la Rosa de Lutero en la fachada de la iglesia con la inscripción, Iglesia Evangélica Luterana “El Redentor” realizada por el artista Jorge Aguirre Soto. El esgrafiado reemplazó el cartel de chapa que hasta ese momento identificaba al templo. Se colocó una campana de 108 kg de sonido “mi” en una espadaña que se abrió debajo de la cruz. Ésta fue forjada en Santa Fe y el bronce utilizado fue recolectado a través de una campaña de donación. El planeamiento y ejecución de la colocación de la misma estuvo a cargo del Ingeniero Industrial Hugo Riehl, quien donó materiales y mano de obra. La campana se hizo escuchar por primera vez con cien campanadas a la medianoche del 27 de julio. En el acto realizado frente al templo, se hizo un reconocimiento especial a las personas y/o descendientes de miembros que se destacaron de una u otra manera a lo largo de estos cien años por su contribución al fortalecimiento de la congregación. El Sr Arturo Mohr, Presidente de la Comisión Directiva, el Pastor Omar Weber y el Presidente de la IELA Carlos Nagel, descubrieron una placa que versa: “TODO TIENE SU TIEMPO” basado en 2 Corintios 6.2. Luego se realizó un almuerzo en el Club Ferrocarril, donde muchas familias disfrutaron de una jornada de encuentros, recuerdos y emociones. La Liga de Damas solicitó al Estudio Creativa del Sr. Iván Alcides, el diseño de dos estandartes con los logos de la Escuelita Bíblica, Grupo de Jóvenes, Liga de Damas, Grupo de caballeros, Grupo de Servicio Sal y luz, y el logo del Colegio Luterano, los cuales se colocaron en los laterales del altar. Se demolieron los canteros al frente de la iglesia y se reemplazaron por cuatro bancos de hormigón. También se agregaron dos maceteros con bellas plantas.
En el 2021, la celebración de los 50 años del templo es postergada ya que el mundo atraviesa desde el 2020 una pandemia que somete a la sociedad a protocolos sanitarios, prohibiéndose todo tipo de actividad social. De igual manera, para este aniversario se realizaron tareas de mantenimiento al templo el cual luce impecable.
Agradecemos a Dios por este hogar que es nuestro templo, donde los cristianos nos reunimos para “Gozar de la dulzura del Señor” en un encuentro de adoración. Hoy nuestro templo cumple 50 años de su construcción, 50 años cobijando a quienes vienen a buscar ánimo, perdón y alegría por la misericordia de Dios. Para Él sea la Gloria. Amén
Esta historia fue escrita por el Pastor Rvdo. Omar R. Weber en oportunidad de la celebración de los 100 años de la congregación en San Salvador. Recopiló información extraída de los libros de actas de la congregación y testimonios orales del extinto pastor Gustavo Bär, del Sr. Hugo Fritzler y de la Sra. Elda Fink.
El Sr. Fernando Bordet actualizó la historia desde la celebración de los 100 años de la congregación.
Idea y realización de la revista: Fernando Bordet.
Revisión y supervisión. Graciela Mohr
Diseño gráfico: Fernando Bordet
Año: 2021