El proyecto tiene como fin indicar en qué status ecológico se encuentra y cuál es el estado de salud del río. Es impulsado por la Facultad de Ciencias de la Alimentación de la UNER. Cuenta con el aval de CARU; CAFESG; Prefectura Naval y la Municipalidad de Concordia.
Se trata de un estudio desarrollado por investigadores de varias disciplinas del Laboratorio de Investigación de Residuos de Alimentos de la Facultad de Ciencias de la Alimentación de la UNER, con sede en Concordia.
El proyecto se denomina “Calidad del agua del Río Uruguay, en el tramo Tortuga Alegre-Puerto Yeruá, utilizando bioindicadores (Diatomeas)” y está dirigido por el doctor Martín Novoa, director de un componente en el programa Doctores en Universidades para Transferencia Tecnológica (D-TEC), docente e investigador de la Facultad de Ciencias de la Alimentación-UNER. Novoa es oriundo de Córdoba, egresado en la Universidad Nacional de Río Cuarto. El trabajo está codirigido por el especialista Fabricio Raviol, docente y también Investigador de la misma facultad.
Consultado por el proyecto, Novoa precisó que “el Río Uruguay ha resultado afectado por la intensa acción humana, es por ello que resulta de vital importancia saber en qué estado ecológico y de salubridad se encuentra. Comenzamos por un tramo, a través del estudio de las algas (Diatomeas) y su relación con otros grupos de algas y parámetros fisicoquímicos para luego poder continuar y extrapolar a otros sectores del río incluso otros cuerpos de agua”.
“Las algas son los productores primarios más importantes en todo cuerpo de agua, sobre el lecho del río se encuentra un grupo particular, las diatomeas, sensibles a las condiciones del hábitat y son los principales indicadores biológicos para determinar la calidad de agua”.
En la primera fase de la investigación, el tramo elegido es el que se encuentra aguas debajo de la represa Salto Grande, entre el camping Tortuga Alegre (Concordia) hasta la localidad de Puerto Yeruá.
“Mediante el estudio de las diatomeas (presencia, ausencia, abundancia) se puede inferir en qué condiciones está el agua en el sitio de estudio en el momento que se tomó la muestra” especificó.
Se seleccionaron 10 sitios para la toma de muestras y ya se realizaron dos de los seis muestreos previstos. De los mismos, se obtuvieron datos de parámetros fisicoquímicos, biológicos y de plaguicidas. Además, Novoa resaltó la importancia del Laboratorio de Investigación de Residuos de Alimentos que la Facultad tiene en Concordia. “Tenemos la ventaja de contar con este laboratorio donde se pueden ejecutar investigaciones multidisciplinarias”.
En base a esto, contó el investigador, surge la necesidad de este estudio del que se vieron interesados varios organismos que lo avalan: la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), Comisión Administradora para el Fondo Especial de Salto Grande (CAFESG), Prefectura Naval Argentina y las Secretarías de Obras Públicas y Políticas Ambientales de la Municipalidad de Concordia. Se espera obtener resultados que sirvan de base para el manejo y gestión sustentable del Río Uruguay.-