Se desató en el monte autóctono que rodea al Palacio San José. Seis dotaciones de Bomberos Voluntarios de la zona debieron acudir en auxilio y trabajar intensamente para apagar las llamas.

Ocurrió este martes por la tarde, en el monte autóctono de la casa en la que vivió y murió el prócer Justo José de Urquiza. Tres dotaciones de Bomberos Voluntarios, una de San Justo y dos de Basavilbaso, trabajaron para controlar y extinguir el fuego.

El Jefe del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de San Justo, Fernando Perron, comentó que acudieron al lugar en momentos en que las llamas eran muy importantes, y que de inmediato solicitaron apoyo de los Bomberos Voluntarios de Basavilbaso que respondieron con dos dotaciones.

“Agradecemos a nuestros compañeros de “Basso” que acudieron de inmediato para prestar colaboración, y luego de un intenso trabajo logramos controlar y extinguir el incendio”, dijo Perron al tiempo que precisó que “hubo un frente de fuego de varios cientos de metros, paralelo al acceso al Palacio, pero que por suerte los corta fuego que se implementaron dieron resultado”.

Sobre las causas que dieron origen a dicho incendio el Bombero se excusó de opinar, pero afirmó que “la sequía puede convertir algo que parece insignificante en incontrolable?este incendio (felizmente controlado y extinguido) afectó unos cuantos metros del “monte autóctono” que está próximo al Palacio San José, hoy Museo Nacional Justo José de Urquiza, ubicado en el Distrito Molino del Departamento Uruguay.

Otro aspecto que hizo visible el siniestro fue que a causa del viento el humo por momentos provocó algunos trastornos a los que transitaban en la Ruta 39, a la altura del kilómetro 128, y unos metros del desvío para el acceso al Museo Nacional.

Perron dijo que ese día fue particularmente intenso para sus Bomberos, ya que a las 10 de la mañana debieron acudir al parque del Museo Nacional, precisamente en la zona del lago, “donde tomó fuego el pasto y producto de la sequía las llamas se propagaron muy rápidamente consumiendo todo a su paso, poniendo en peligro una casa de uno de los cuidadores”.

“Fueron casi tres horas de intenso trabajo, hasta que se lo logró extinguir por completo. Lamentablemente sufrimos un inconveniente mecánico en la única unidad con la que contamos, por lo que la “pelea” con el fuego fue algo algo desigual, no obstante la bravura de nuestra gente y de nuestros colaboradores permitieron lograr el objetivo”, resumió.

Entre tanto, apenas un par de horas después de haber dejado todos los equipos en condiciones para una eventualidad a la que fueran convocados, se les requirió (aproximadamente a las 16) la presencia en la zona del monte autóctono. Fuente: Riel FM