El malestar de los productores frente al “impuesto a la riqueza” se vio reflejado en un retiro masivo del banco que preside el diputado Carlos Heller.
Carlos Heller es el presidente del Banco Credicoop, titular de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados y, a su vez, impulsor del “impuesto a la riqueza” que se debate en el Congreso.
A modo de reclamo, cientos de productores optaron por cerrar sus cuentas del banco cooperativo con el objetivo de expresar su repudio al “aporte solidario” que busca sancionar el oficialismo.
“Esta es una manera activa y legal de expresar nuestro rechazo ante un nuevo impuesto que alcanzará también a pequeños productores y contratistas debido a los altos valores de la maquinaria agrícola y agravará aún más la presión fiscal ya insoportable. El diputado Carlos Heller siempre ha demostrado ser un permanente detractor de la producción rural”, destacan entidades de productores del norte de Buenos Aires.
Se estima que el Banco Credicoop tiene el 50% de las sucursales en áreas agrícola-ganaderas y que el 70 % del negocio actual depende de las actividades productivas. La mitad de ese monto es de documentos y tarjetas vinculados a empresas del sector agropecuario y pymes de otros sectores
“Más de la mitad de los depósitos provienen de estas empresas (agro y pymes)“, destaca una fuente y agrega que “si bien las financia poco, usa si mucho de sus depósitos para hacer ganancia de intermediación con el Banco Central, su principal fuente de ingresos”.
En la plaza se hablaba de que habrían cerrado cerca de 1.000 cuentas, que serían cerca de 1/3 del negocio de documentos y tarjetas para financiamiento de pymes: “Fue masivo”, destacan.
Frente a esta situación, la conducción de la Asociación Bancaria, que es el sindicato en el que están organizados los trabajadores y trabajadoras de las empresas bancarias que actúan en Argentina, repudió “la campaña golpista, antisocial y antinacional contra el Diputado Carlos Heller, por su posición sobre el necesario impuesto a la riqueza, y contra el Banco Credicoop, fuente de trabajo de miles de bancarias y bancarios”.
El malestar de los productores queda reflejado en una carta que envió la CARBAP en el marco de la labor desarrollada ante el Congreso de la Nación por temas legislativos, a todos los legisladores nacionales, diputados y senadores, de Buenos Aires y La Pampa, en la que le expresa su posición acerca de un “impuesto que gravaria fuertemente al sector impidiendo los naturales procesos de reinversion en el mismo”.
A continuación, el contenido de dicha carta:
Buenos Aires, 28 de septiembre de 2020
Sr. Legislador Nacional
PRESENTE
De nuestra consideración:
Nos dirigimos a Ud. dado el inminente tratamiento del “aporte solidario y extraordinario para ayudar a morigerar los efectos de la pandemia”, a estos efectos queríamos manifestarles las siguientes consideraciones:
1) Dada su naturaleza jurídica no nos encontramos ante un aporte solidario sino ante un impuesto directo.
2) No se toma en consideración el patrimonio de la persona sino solamente los activos, ya que el pasivo aún pudiera corresponderle al activo que se grava no se puede considerar.
3) No existe un mínimo no imponible sino un mínimo no gravado provocando esto que la persona que supere con su patrimonio en $1 los $200 millones pagará sobre el total y no sobre el excedente.
4) Este punto es de significativa relevancia para el sector agropecuario ya que la ley 27480 modifico la ley 23966 del impuesto a los bienes personales, quedando redactado el articulo 21 inciso f de la siguiente manera: “quedaran exentos del impuesto los inmuebles rurales cuyos titulares sean personas humanas o sucesiones indivisa, cualquier sea su destino o afectación.”
El presente tributo no mantiene las exenciones que fija la ley de bienes personales en su artículo 21 inciso f. Esto hace que los inmuebles rurales que son un elemento utilizado en la producción agropecuaria queden alcanzados. A este efecto es necesario discernir o separar entre un bien de carácter suntuario o financiero y un bien de carácter productivo como son las parcelas rurales.
Se debe aclarar que todos los bienes muebles y semovientes que se utilizan para la producción agropecuaria también resultarían alcanzados.
Por lo arriba manifestado es que le solicitamos considere la necesidad de excluir de este tributo las parcelas rurales y los bienes muebles y semovientes utilizados en su producción.
En la seguridad que Ud entenderá la incidencia económica que este tributo en tratamiento tendría de mantener su actual redacción, lo que obligaría a la liquidación de activos, además de no permitir los procesos de reinversión tan necesarios dada la realidad económica de nuestro país.
Sin más, saludamos a ustedes muy atte.
Matias de Velazco: Presidente de CARBAP
Roberto Citttadini: Secretario