Grave amenaza a la libertad de prensa en San Salvador: Periodista denuncia intimidación de muerte

Las amenazas a periodistas en nuestra ciudad no son un fenómeno nuevo. Con frecuencia, delincuentes se sienten expuestos por publicaciones, políticos se molestan por revelaciones incómodas, o incluso la opinión pública se queja por manejos irregulares. Sin embargo, los recientes acontecimientos, y en particular lo sucedido al colega Carlos Challiol de Noticias y Hechos, han traspasado todos los límites imaginables.

Carlos Challiol, periodista de San Salvador, se convirtió en protagonista de un grave incidente el pasado viernes. Según su denuncia presentada en la Sección Judiciales de la jefatura local, la madrugada se tornó inquietante: «Cerca de las 4.14 noto que el aire acondicionado estaba apagado. Me levanté para corroborar de qué se trataba y aparentaba ser un corte de luz». Tras verificar que el inconveniente no provenía del interior de su vivienda, sino del exterior, intentó seguir descansando.

La verdadera conmoción llegó alrededor de las 6 de la mañana. «En la puerta de ingreso a la vivienda, debajo de una toalla de mi madre, encontré una nota con letras de revistas, con la frase ‘seguí jodiendo y sos voleta'», relató Challiol.

El periodista señaló que las cámaras de seguridad de su casa, que funcionan con conexión a internet, dejaron de grabar a las 4:14 de la mañana, coincidiendo con el momento en que se interrumpió el suministro eléctrico desde el exterior. La filmación se reanudó a las 5:08 horas. Al revisar los registros previos al corte, Challiol observó «circular un vehículo por la calle del frente, situación que me parece extraña teniendo en cuenta lo antes relatado».

«Desconozco quién pudo haber dejado este mensaje, pero lo relaciono con que recientemente publiqué un artículo periodístico que hace referencia al narcotráfico en San Salvador, y no es la primera vez que publico esta clase de artículos», concluyó el periodista en diálogo con El Entre Ríos, aludiendo a la posible motivación detrás de la intimidación.

Cabe recordar que Carlos Challiol fue el periodista cuyos datos personales fueron publicados el pasado 29 de mayo en la página oficial del Ministerio de Seguridad y Justicia de la provincia, así como en las redes personales del ministro Néstor Roncaglia, en el marco de la desmentida de una información que había difundido.

Challiol mencionó a nuestro medio que, inicialmente, había recibido apoyo de las autoridades departamentales de policía, e incluso se le brindó custodia policial en su domicilio. No obstante, esta protección duró apenas un suspiro; fue retirada después de solo un día de su casa, donde reside con su madre de 73 años, quien padece problemas de salud.

Es imperativo que las autoridades de seguridad de la provincia asuman su rol y no desvíen la mirada, como tristemente nos tiene acostumbrado el poder político en todos los niveles, especialmente cuando sus intereses se ven afectados y van en contra de las necesidades del pueblo al que dicen representar. La protección de la prensa y el compromiso con la verdad son pilares fundamentales de una sociedad democrática.