La familia Ferdman-Sereno y el equipo de cabaña Arasy, en la Rural de Riachuelo.
Esta semana se desarrolla en Corrientes la Exposición Nacional Bradfor, donde la Cabaña Arasy de Leandro Ferdman (San Salvador) consiguió un importante logro en la primera jornada cumplida este lunes 27 de mayo.
Se quedó con el Campeón Individual de lote, con la ternera que estaba en el Box 779 del corral 29 de la Cabaña Arasy de San Salvador.
El ternero nació en septiembre 2023 y con apenas 9 meses era el más joven de los 200 que participaron del concurso y les ganó a todos, lo que desató la locura y una enorme alegría entre los integrantes de la cabaña sansalvadoreña que tiene apenas 4 años de trabajo.
El logro de la familia fue reflejado en una nota en el diario Clarín, que reproducimos a continuación.
Hay conversaciones en las que lo más importante no lo dicen las palabras sino algo más sutil, un tono, un quiebre casi imperceptible en la voz que revela la emoción profunda que hay detrás de cada historia. El esfuerzo, los anhelos y la alegría se revelan sin tener que mencionarlos.
En la Rural de Riachuelo, Corrientes, Leandro Ferdman acaba de ganar el primer premio individual a corral de la Exposición Nacional Braford con un ternero de su cabaña, y todavía parece que no le cae la ficha. Es la primera participación en las Nacionales de la cabaña Arasy, de tan solo 4 años de vida, toda la familia viajó desde San Salvador, en el centro de Entre Ríos, con el único objetivo de mostrarse y aprender, y ahora se colaron entre los grandes.
Leandro es ingeniero agrónomo y trabajaba brindando asesoramiento a terceros en ese enclave principalmente arrocero. En 2013 heredó 70 hectáreas y con su mujer, Alejandra Sereno, decidieron empezar a hacer ganadería, compraron diez vacas preñadas, un toro y 30 vaquillas Braford, y ya entonces apareció el sueño de la cabaña. Con el tiempo alquilaron algunas hectáreas, sumaron un campo de la familia de Alejandra y fueron comprando animales. El rodeo general hoy tiene 500 vientres y hacen cría, recría y a veces terminación, y mientras tanto, desde hace cuatro años están inscriptos como cabaña en la Asociación Braford.
“Empezamos a hacer las cosas con más seriedad. Venimos comprando vacas y toros que nos gustan en remates. Tenemos muchos de Pilagá, que para nosotros es un ejemplo a seguir. Y la primera exposición que participamos fue la regional de Feliciano, donde nos fue muy bien desde el principio, ya veníamos con buena genética. El año pasado sacamos el Reservado Campeón en la Regional del Litoral y una ternera fue campeona a corral. Cuando arrancamos con la cabaña siempre dijimos que apuntábamos a la Nacional y a Palermo. Cuándo se llega no importa”, dice el cabañero, que además del trío que participó a corral trajo hasta Riachuelo una ternera, dos terneros y un toro que por un problema de aplomos no pudo entrar en competencia.
Leandro Ferdman junto a sus cuatro hijos, y su esposa Alejandra Sereno.
“Salir a las exposiciones a mostrar es lo básico, porque si no te quedás adentro y no te conoce nadie. Además es una forma de agradecimiento a toda la gente que trabaja cada día para esto, no solo en la cabaña sino en la ganadería”, dice Ferdman. A su lado se puede ver a su mujer, a los hijos Anaclara y Gonzalo, al veterinario Joaquín Mancioni, a cabañero Rodrigo Sebastián Gómez, a Hugo Ortiz, el chofer del camión que trajo los animales. Y en San Salvador quedaron otros tantos que a Leandro se le vienen a la mente en este momento.
“Todos los días se aprende algo nuevo. A dónde va la raza, qué están buscando, nos sirve para orientarnos. Nosotros tenemos muy claro desde el principio que buscamos un animal bien productivo, que nos sirva a nosotros y a cualquiera, con un frame moderado”, describe.
El próximo 1 de octubre en Chajarí, en un remate con otras cabañas, Ferdman apunta a sacar a la venta poco más de veinte toros de dos y tres años y vaquillas para entorar.