Aumentos de entre el 20% y el 30% se verifican en los precios de quesos en fábrica en lo que va de 2019. En enero, el incremento estuvo en el entorno del 10%; y en lo que va de febrero la suba ya es superior, y en algunos casos es mayor al 15%, de acuerdo al relevamiento de TodoAgro.
El fuerte aumento es producto de un combo en el que se mezclan la falta de producción en los tambos (impactados por los fuertes calores), la necesidad de un mejor precio a los productores, un incremento de las exportaciones y por ende un mayor flujo de los vasos comunicantes entre polveras y pymes queseras, y los bajos stocks con los que venían trabajando las empresas queseras, teniendo en cuenta las altísimas tasas de interés con las que prestan los bancos, lo que hace que muchas empresas decidan vender mercadería muy fresca para fondearse.
Un amplio relevamiento realizado entre una decena de empresas lácteas y mercadeadores de todo tamaño, y consultas a supermercados, concluyó en que se verifican aumentos de entre el 20 y el 30% de los precios de los quesos en puerta de fábrica. Por ejemplo el cremoso que se vendía en el entorno de los $105, ya supera los $130 en esta semana.
Los efectos ya pueden verse en las góndolas, e incluso en los negocios exclusivos de frescos, donde los aumentos son consistentes y se dan semana tras semana.
Si se repasa, empresa por empresa, las tácticas han sido y son diferentes. Por ejemplo algunas optaron por subas escalonadas, y no bajar tanto cuando las restricciones del mercado doméstico así lo ameritaba, otros que bajaron mucho cuando la demanda se apaciguó subieron con mayor fuerza ahora que falta producto; y desde todos los orígenes hubo muchos pases de leche entre empresas para evitar altos stocks de quesos. Si bien es cierto que la exportación fue mejor negocio tras la devaluación, posteriormente tuvo una caída tras la aplicación de retenciones, y el aplanamiento del precio a nivel global. Pero eso cambió desde diciembre y se profundizó en el arranque de 2019. Por ejemplo, febrero llegó con un importante repunte en el precio de la leche en polvo entera que trepó más del 8% en su precio respecto a enero, que ya venía aumentando.
Eso ayuda a que las Pymes consolidadas retomen exportaciones, o que haya pase de leche hacia polveras desde pymes queseras necesitadas de efectivo.
Las restricciones del mercado interno continúan
En un reporte publicado por el Observatorio de la Cadena Láctea, puede observarse que las ventas acumuladas de la muestra en 2018 tuvieron una disminución del 1,9% en litros de leche equivalentes. El proceso de caída de las ventas en el mercado doméstico (contrarrestada con el aumento en los volúmenes exportados), se fue acelerando mientras transcurría el año, ya que si comparamos diciembre 2018 respecto a igual mes del año anterior, la caída es de 13,9% en litros de leche equivalentes.
Si se compara la totalidad de rubros, diciembre de 2017 versus diciembre de 2018 la caída en leches fluidas es del 4,8%, de leche en polvo de -40,5%, en quesos la caída alcanza al 8% y en otros productos llega a -11,9, con lo que el promedio da -13,9%.
Estas restricciones continúan y se acentúan con el aumento de precios de los lácteos y solo queda por evaluar cuál será el impacto del año electoral en el bolsillo de los consumidores, aunque no hay pronósticos optimistas.
El vigor de las exportaciones ayuda a una menor oferta de leche destinada a mercado interno
Según la Secretaria de Agroindustria, en 2018 las exportaciones lácteas crecieron un 32,8% en volumen respecto a 2017, esto significa casi cien mil toneladas más que el año anterior.
En cuanto a la facturación el año pasado se comercializaron productos por un valor total superior a 1.008 millones de dólares, que representan un incremento del 30%, al considerar los 776 millones de dólares facturados en 2017.
Las ventas al exterior se canalizaron a 69 países en todo el mundo donde se destacan por su participación: Brasil, Argelia, China, Rusia y China. Mientras que entre los principales productos comercializados se encuentran: leche en polvo entera (40%), suero (18%), quesos (17%), leche en polvo descremada (7%) y leches con fórmulas infantiles (6%).
“Las exportaciones son el camino para una lechería ordenada que tenga previsibilidad, y este crecimiento está confirmando que más allá de la coyuntura de precios o climática la leche tiene una política pública de transparencia, ordenamiento y protagonismo de los mercados”, indicó la Secretaría de Agroindustria a través de un comunicado.