Feliciano: Doble asesinato: ¿Qué indicios llevaron a dar con el único detenido?

Celeste Argentina Brest de 63 años y su hija Lucia Brest de 27, fueron encontradas muertas este jueves en la zona rural de Feliciano. Según informaron fuentes policiales, primero fue hallado el cuerpo de la mujer mayor, que presentaba profundos golpes en la cabeza, lo que motivó una investigación para aclarar el homicidio y la búsqueda de su hija, de la que hasta el momento se desconocía su paradero.

En la búsqueda, localizaron el cadáver de la joven a unos 250 metros de donde estaba el cuerpo de su madre; de acuerdo a los primeros datos, estaba sobre un bañado, y a su lado, había un cinto, con el cual se presume que fue ahorcada.
Con el avance de las investigaciones surgió un sospechoso, un joven de 23 años, que se había desempeñado como changarín en la chacra de unas siete hectáreas, cuyas propietarias eran estas mujeres.
La mujer más grande había vendido días atrás un par de vacunos, por lo que se sabía que en su casa podría llegar a tener una suma cercana a los 10.000 pesos. Se presumió así que el móvil del doble homicidio pudiera ser un robo.
Hubo tres allanamientos, uno de estos en el lugar donde vive esta persona, donde se secuestraron elementos de interés para la causa, entre éstos, dinero en efectivo, la tarjeta de cobro de la mujer de 63 años y el celular de su hija.
El muchacho fue detenido y quedó a disposición de la justicia por el doble crimen de las mujeres.

Cómo la justicia encontró al sospechoso

Todas las sospechas apuntaron a este joven changarín porque fue él quien hizo de intermediario en la venta de un par de vacunos que concretó Brest con un comprador de la zona.
El comprador entregó unos tres mil pesos al peón rural, pero había algo que no le cerraba en la transacción. Sus dudas se acrecentaron cuando el changarín lo llamó desde el celular de la joven y se hacía pasar por ella.
Ante las sospechas, este hombre se dirigió hasta la chacra, y allí encontró el cuerpo ensangrentado de la sexagenaria y dio aviso a la Policía.
Allegados a la investigación valoraron “la buena voluntad y honestidad del comprador”, detalles que fueron determinantes para esclarecer el doble asesinato.