Daniel Petelín, párroco de la Gruta de Lourdes de Concordia, se refirió a la situación de crisis que vive el país por el coronavirus, y que afecta de forma directa a quienes menos tienen.
En diálogo con El Entre Ríos, contó: «Estamos sintiendo mucho el golpe, porque muchos de los que viven en nuestros barrios son changarines, algunos se defienden con pequeños trabajos diarios y otros juntan de la basura, entonces como ahora no pueden andar en la calle, ni hacer changas la situación económica afecta y mucho».
La situación hizo que la comunidad sintiera el impacto y esto llevó a que el número de familias que necesitan asistencia aumente considerablemente. «En la parroquia se ven todos los días personas que andan buscando algo para comer, nosotros, en la parte del comedor, hemos organizado para los sábados a la noche también una entrega de comida. En este último sábado 500 personas llevaron para comer, hicimos una ración para esa cantidad. A diario muchos vienen a buscar alimentos y esto pasa porque no tienen», dijo y agregó: «Nos reunimos con los representantes del gobierno y el grupo de Cáritas diocesano y hemos pensado en organizar algunos comedores comunitarios, además de los que ya están. Seguramente en la semana habrá alguna información sobre eso, todavía no tenemos información sobre eso».
«Nosotros estamos trabajando todos los días. De lunes a viernes se entregan raciones para 400 personas, los sábados se aumentó más de lo normal porque los fines de semana no tenemos comedor comunitario por eso se implementó esta cena, organizada por la comunidad. Se que en distintos lugares en los que comunidades parroquiales piensan en organizar cosas parecidas. La situación es compleja y por eso se agradece a los ciudadanos, a los políticos, a quienes están poniendo el hombro para que quienes menos tienen no sientan tanto el impacto», indicó Petelín.
«Estamos preocupados también por las personas en situación de calle que la hemos alojado en una casa que alquilamos para eso», comentó, respecto de la cuarentena y la prohibición de salir. «Es difícil tener que ayudar cuando no tenemos demasiadas posibilidades, porque quienes habitualmente colaboran no pueden desplazarse para traer alimentos. Nos vemos en dificultares pero agradecemos a todos los que están ayudando y también que a quienes tienen paciencia y ayudan a sus vecinos, a las personas mas necesitadas de su familia, porque es una situación de solidaridad. Sabemos que al extenderse la situación de cuarentena seguro en el plano económico todo se agrava, así que por eso agradecemos a quienes se preocupan por ayudar a los que tienen al lado porque esto nos cuesta a todos porque al no poder salir no sabemos a dónde se podría ir a buscar alimentos», expresó.
Semana Santa diferente
Por la cuarentena, las Pascuas serán distintas este año. Sobre eso, Petelín señaló: «Es una Semana Santa muy diferente de todas las vividas. Estoy viviendo prácticamente solo y la comunidad cada uno en sus hogares. Nos encontramos a través de los medios digitales o de la radio pero estamos viviendo la Semana Santa más individualmente que comunitariamente. Es un modo distinto. Pienso mucho en lo que ha sido la primera Pascua, en la que el Señor decía que cada uno debe celebrar en su casa. Antes de salir al mar Rojo, cuando pasa el Señor, cada uno debía celebrar con el cordero en su casa y cuanto mucho invitar a algún cercano. La Pascua de ahora es celebrar cada uno en su casa y saber que el Señor pasa, que nos bendice, nos protege y nos librará».
«Pascua es justamente el paso de Dios por nuestras vidas, que nos bendice dándonos la liberación. Ahora no tenemos un enemigo físico sino un virus que nos afecta en lo físico, nos hace mucho daño y no es a un pequeño pueblo de Israel, ahora es el mundo entero, entonces lo espiritual hay que fortalecerlo mucho porque cuando uno se prende en esta realidad dolorosa nos desanimamos, entonces el señor para por el medio de todo esto para aliviarnos», concluyó. Fuente: El Entre Ríos