Empresarios de la agroindustria creen que el Gobierno modificará la Ley de Semillas vía un decreto

En el Congreso fracasó la iniciativa del oficialismo para reordenar el cobro de regalías que demandan las compañías de desarrollo genético

Monsanto. La firma retiró del proceso regulatorio una soja con tecnología para mejorar el control de malezas.

En el sector privado del agro están convencidos de que el gobierno nacional introducirá cambios a la actual Ley de Semillas, la Nº 20.247 que data de 1973, vía un decreto presidencial. La información llegó a las entidades del campo y la industria de semillas.

Según contaron diversas fuentes privadas al periodista Fernando Bertello, que suele hacer las veces de vocero de los dirigentes agropecuarios, se trata de La Nación, de una reunión de gabinete trascendió que el presidente Mauricio Macri preguntó en qué estaba el tratamiento por semillas en el Congreso. Allí le transmitieron que tras un dictamen para modificar la norma no se llegó a su debate en el recinto.

Tras esa respuesta, el jefe de Estado habría solicitado que se estudie la vía de un decreto para actualizar la norma. Vale recordar que la ley de 1973, dictada cuando no había transgénicos y apenas estaba dando sus primeros pasos la soja, permite el uso propio sin restricciones.

En cambio, el dictamen que el oficialismo aprobó en 2018 incorpora el pago por ese uso propio, salvo para pueblos originarios, agricultores familiares y productores con no más de 4,8 millones de facturación. También contempla que las empresas informen lo que quieren cobrar de regalías en la semilla durante cinco años por una variedad.

El año pasado, el oficialismo logró avanzar con el dictamen y hubo un intento por llevar el tema al recinto antes de que finalizara 2018. En 2019 hubo al menos otros dos intentos para debatir el tema, pero no prosperaron porque parte de la oposición peronista que el Gobierno confiaba iba a acompañar no dio su aval.

Semillas era uno de los objetivos a cumplir por el Gobierno para atraer inversiones. Algunas empresas tienen frenados eventos para el país a la espera de que se sancione una nueva ley. De hecho, Monsanto, firma que pasó a ser controlada por Bayer, retiró del proceso regulatorio una soja cuya tecnología apuntaba a mejorar el control de malezas.

La semilla fiscalizada, que todos los años se vende en el mercado, apenas ronda el 20% (sin contar regalías extendidas). El resto se divide entre el uso propio gratuito y el circuito ilegal. El mercado formal de semillas en soja no supera los 200 millones de dólaresy en el sector semillero creen que podría ubicarse en los 1.000 millones si se formalizara.

Según las versiones que están circulando, tras el comentario de Macri en la Casa Rosada se habría esbozado un decreto siguiendo los lineamientos del dictamen de 2018. Sin embargo, desde la conducción del oficialismo en el Congreso se habría hecho llegar el mensaje de que sacar un decreto podría no ser conveniente y que resultaría oportuno buscar otra chance para su tratamiento en el recinto.

La dificultad de esta última vía son los tiempos electorales, ya que hoy todo el arco político está con el foco en las elecciones. En la última edición de Expoagro, Macri insistió en una reunión con referentes del agro que debía avanzarse con semillas. Pese a la intensidad de las versiones, ante una consulta en el ahora Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca dijeron que no tenían nada sobre el tema.