El Mercado de Liniers constituye el centro de transacciones pecuarias más importante del país, siendo por sus características propias, único en la región y en el mundo. Allí, suceden todas las mañanas auténticas pujas entre compradores, quienes esperan que suene la campana de la subasta para comenzar a pujar por los animales que les interesan.
Este ritual se repitió ininterrumpidamente desde 1901, cuando comenzó a funcionar oficialmente en el barrio de Mataderos, en la zona sur de la ciudad de Buenos Aires. Lugar en donde se determinan las cotizaciones, que a su vez son rectoras de los precios de la ganadería nacional.
Sin embargo, este viernes se dio fin a un ritual que se repitió durante 121 años, ya que en abril el Mercado de Hacienda de Liniers se traslada a la localidad de Cañuelas, a 70 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Ubicado en el kilómetro 88 de la ruta provincial 6, el nuevo Mercado de Cañuelas comenzó a gestarse como parte de un megaproyecto a comienzos del 2018 y busca transformarse en un polo de los agronegocios.
El mismo contará con capacidad para recibir entre 10 y 12 mil cabezas diarias; una planta de tratamiento, que recibirá principalmente los efluentes que genera el lavadero de camiones; y una compostera a cielo abierto. Sin embargo, sus principales diferencias respecto a su predecesor son: mejor transporte, buscando en todo momento el menor desplazamiento de los animales y la mayor fluidez en sus traslados a los distintos sectores; junto con una reducción de los costos logísticos que significa evitar el ingreso a la Capital Federal.
Esta semana, Andrés Mendizabal, consignatario y presidente del Mercado Agroganadero de Cañuelas (MAG) expresó en una entrevista radial en el programa “Tranquera Adentro” que “es importante sacarlo de la Ciudad y llevarlo a la periferia por los camiones, logísticamente era una necesidad y estructuralmente creo que el Mercado tenía una necesidad desde el lado medioambiental”.
Puesta en marcha
En febrero comenzaron las pruebas y la puesta a punto para comenzar a operar en el nuevo Mercado de Cañuelas. Todos los lunes, se realizaron remates pequeños de cerca de 1.000 vacunos para preparar las instalaciones y aceitar los traslados a la hora de recibir la cantidad de ganado que acostumbra el Mercado de Liniers.
En este marco, no solo los precios fueron muy similares a los obtenidos en la tradicional plaza de Liniers, sino que fue de destacar la velocidad en la descarga de hacienda y su posterior salida.
¿Qué pasará con el antiguo predio?
Luego de su traslado hacia la localidad de Cañuelas, los habitantes del barrio de Mataderos se preguntan sobre qué futuro le depara a las 34 hectáreas que están detrás del muro blanco que conforman el actual Mercado de Liniers.
Según algunos trascendidos, la idea que se baraja es destinar una parte a viviendas sociales y crear un polo gastronómico, cultural y turístico alrededor de la carne que recuerde los orígenes del barrio y favorezca el desarrollo de la zona. Fuente: Agroclave.