El interlocutor casi exclusivo del sector cárnico con funcionarios del gobierno nacional fue en los últimos meses el Consorcio ABC, que representa a los principales frigoríficos exportadores.
Por eso, cuando la semana pasada el gobierno distribuyó el 80% del cupo cárnico mensual de exportación de 27.608 toneladas entre los integrantes del Consorcio ABC, además de inhabilitar la posibilidad de que empresas sin planta industrial propia puedan gestionar permisos de exportación por su cuenta, no fueron pocos los que vieron una extraña casualidad.
“Hay lobbies que logran llevar los beneficios para su lado. Le dijimos al gobierno que debe habilitar más empresas para exportar, pero hicieron al revés y al final once industrias se quedan con la mitad del negocio”, apuntó al respecto, Sergio Pedace, vicepresidente de la Cámara de Matarifes (Camya).
“El gobierno armó un monopolio de la exportación, le dejó el negocio exportador al ABC y a nosotros nos dejó sin nada”, añadió el empresario cárnico a Bichos de Campo.
El matarife dijo que, si bien el gobierno actúa en función de intereses electorales, duda de que las medidas puedan reducir de manera significativa el precio minorista de la carne vacuna.
“Lo que están sucediendo es que termina bajando el precio de la hacienda por toda la incertidumbre que hay y porque hay menos demanda exportadora, pero eso no significa que baje el precio en la carnicería porque suben los costos fijos como combustibles, personal o alquileres”, explicó.
Pedace además indicó que les acercaron a las autoridades nacionales una propuesta mediante la cual los matarifes –que abastecen a la mayor parte del consumo en el conurbano bonaerense– podrían subsidiar la carne en el mercado interno a cambio de facilidades para exportar, pero que no fueron escuchados porque finalmente se diseñaron políticas a la medida del Consorcio ABC.