Multifacético (escritor, músico, mecánico), la fotografía es una de las pasiones del uruguayense Javier Gauna, integrante de una familia bien tuerca (su padre corrió en Fórmula Entrerriana y su hermano Lucas en karting, además de formar dupla con Daniel Bouvet en Vértigo de Carrera). Javi fue uno de los seis fotógrafos, de quienes colaboran con ACELERANDO, a quien recurrimos para que nos dejara sus impresiones en la edición papel de junio.
-La fotografía fue una continuación de tu pasión por los fierros, que ya venía de familia?
-Mi viejo era piloto (de Fórmula Entrerriana), mi hermano (Lucas, de karting) era piloto. Siempre estuve ligado al automovilismo como espectador o mecánico. Yo correr nunca corrí, pero siempre me gustó la idea de estar en el circo. En 2013 yo vivía en Paraná, me estaba iniciando en la fotografía, me enteré de casualidad (no hay promoción ni nada de eso) por mi hermano. Hace rato que no he iba a presenciar carreras y tiré un par de fotos y me gustó. Ya para el 2014 me largué a tratar de hacer fotografía más adentro pista y bueno siempre fue cuestión de ir aprendiendo de los fotógrafos con más experiencia como como vos como Hugo (Barrionuevo), cómo Andrés (Queirolo) que más que nada me dieron una idea más que nada de dónde ubicarme la pista y otras cuestiones.
-Después de esos primeros pasos tuviste un parate porque se fuiste de Paraná…
-Claro el 2015 yo me fui a vivir a Brasil. Lo loco es que había comprado una cámara nueva y me estaba equipando mejor para ese año, pero me surgió de irme y me fui. Para 2016 cuando volví me reincorporé, iba creciendo todo y me fui equipando un poquito mejor y de poco retomé. Ese año 2016 fue cuando más carreras cubrí, llegué a cubrir todas las carreras de karting, todas las provinciales y todas del 850 y sume algunas de TC del Litoral y La Morena, así que ese año tuve más de 30 carreras.
-¿En Brasil hiciste algo relacionado con las fotos?
-No porque la zona donde yo estaba no era mucho de las carreras, eran un poco más al sur. Estuve vinculado con la gente del rally ella y en algún momento surgió la posibilidad de hacer algo, pero a nivel fotografía no hice nada allá.
En 2016 trabajé con mi hermano y tratamos de dividirnos todo. Ya para 2017, vimos que no se podía semejante ritmo y fuimos achicando un poco la cantidad de carreras, sobre todo dejé más que nada el karting provincial, en 2018 ya no lo cubrí. También surgió otra cuestión: las categorías provinciales se empezaron a achicar, a hacer menos carreras, empezaron a tener más problemas con los calendarios y a mí con únicamente seguir a las provinciales no me generaba un costo, pero era muy complicado de seguir y en contraposición a eso me surgió también la posibilidad que Competición Especial que corre en Uruguay, de donde soy yo, donde vivo, me ofreció un arreglo económico para cubrir todo el año. Entonces a partir de 2018, que fue cuando surgió esto, se me juntaba una provincial con competición especial 850 y tenía que ir a ésta. Y actualmente ya el año pasado las provincias tuvieron muchos problemas para competir y cubrí solamente dos carreras en todo el año y este año iba a hacer exclusivamente Especial 850 y a las provinciales ni siquiera ir a una carrera.
-De todas las categorías que cubierto tiene una preferencia por alguna.
-A mí siempre me gustó la Fórmula Entrerriana por sobre todas las cosas, por historia, el tipos de autos, los tipos de carreras, a mí siempre me gustó más el auto de Fórmula por sobre el auto con techo. A nivel de fotografía también es muy pintoresco un auto de fórmula, tenés muchos más posibilidades de tomas, si bien no hay tantos roces como en los autos con techo, pero he sacado lindas fotos a nivel estético de la Fórmula Entrerriana, qué es la que más me atrae. Y es la que más lastima me da porque para mí no tiene ninguna posibilidad de arrancar. Creo que se la ha desvalorizado mucho a la categoría y a los pilotos no le ha resultado nada atractiva para correr, pero fíjate que la definición del Campeonato 2018 con 4 pilotos en 4 puntos llegando a la última fecha, tres cambios de líderes de campeonato hubo en todo el fin de semana. Quiere decir categoría el espectáculo da, lo que pasa que no se le está dando la importancia y yo en ese sentido siempre fue una defensor de la Fórmula Entrerriana, más allá de las críticas que puedo hacerle a la dirigencia a nivel de cómo se manejan las cosas, pero evidentemente la categoría siempre dio grandes espectáculos.
Yo insisto en la situación: si tuviéramos una Fórmula Entrerriana fuerte, el automovilismo entrerriano entero sería muy fuerte porque todo competirían con el objetivo de llegar a la Fórmula Entrerriana y no tener un pibe de 16 años que se bajó de un karting y lo subís a un TC Pista.
Incluso te diría que las carrera de Competición Especial 850 son muy lindas, me encantan. Me parece una categoría que en este momento en la que mejor se está manejando a nivel dirigencial, es la que más autos está sumando. Es una categoría muy responsable, también a hora del trato con el periodismo, creo que si bien he tenido buenas experiencias con los dirigentes y otras muy malas a nivel provincial, acá nivel zonal nos han tratado muy bien y siempre rescato que son de escuchar no solamente a los pilotos, no solamente a los mecánicos, también se toman su tiempo para escucharnos porque nosotros en pista más de una vez vemos cosas, también tenemos nuestra opinión y son muy importantes personas como Tito Rougier, Sergio Rivero, Andrés Fleitas, que se toman su tiempo de sentarse y decir a ver qué opinan ustedes porque nosotros también construimos este gran espectáculo porque no es solamente salir sacar una foto y dar un poco de difusión, es también trabajar y aportar nuestro. Más de una vez nosotros no hemos visto poniendo el hombro para ayudar el espectáculo fuera de lo que es la fotografía, cargando equipos, empujando autos, hemos hecho un montón de cosas y por ahí está bueno que tengan la opinión nuestra.
-Recordame como fue la situación al sacar la secuencia del vuelco del Citroën en Concepción del Uruguay
Cuando lo vi venir, nunca imaginé ver un Citroën en el aire, es la última cosa que esperaba ver un Citroën volcar de esa manera. Lo primero que pensé es tiro la foto y después veo si corro. Cuando vi que ya no llegaba ahí, me quedé quieto, pero creo que por ahí es una parte de la locura que tenemos los fotógrafos, primero saca la foto y después corre. En vez de correr para cualquier lado sin saber, primero quería ver un poco como venía y después tiré las fotos.
-También tenés la secuencia de un vuelco espectacular de un karting en Concordia.
-Luca Ronconi en la final de 150 A. Tengo la secuencia entera, son 12 fotos, le pegó de atrás Guille Suárez me acuerdo, entraron muy jugados. Ronconi era bastante vehemente y si yo te digo que yo lo estaba esperando a Ronconi porque yo ya lo tenía marcado, no vez a creer. Cada vez que pasaba lo enfocaba porque sabía que se podía mandar alguna.
-Seguramente tenés más situaciones particulares que te tocó vivir.
-He tenido experiencia más que nada de ser el primero que llega al accidente. Voy, corto la corriente, preguntándole al piloto cómo está, trato de comunicarme con los banderilleros, sea por señas o lo que sea,
El otro día el choque de Dubois en la última carrera fui el primero en llegar y la situación particular más importante fue la primera vez que vino Citroën al autódromo de Concepción del Uruguay que en la última curva Arnaudin se pegó fuerte, se le salió el casco, se pegó la cabeza. Estaba desmayado, ahí no tiré la foto de entrada a seguir, vi que estaba respirando, que le sangraba la nariz. Cuando él se despertó, cuando vi que estaba bien recién ahí empecé a tirar foto para mostrar el trabajo de los rescatistas que fue espectacular.
-Y de situaciones climáticas adversas tenés todas.
-Sí, eso sí, llegar a mi casa quemado entero por más que te pongas protector. Una serie acá en Concepción de Competición 850 donde se largó a llover de golpe, en abril de 2018, y el banderillero me tenía el paraguas mientras yo sacaba la foto y estábamos los dos ahí abajo porque ya se había puesto bandera roja. Pero sí, calor, viento, víboras, de todo. Lo complicado es después cuando llegas a tu casa con los pies hinchados, deshidratado y tenés que editar fotos, el trabajo que mucha gente no ve. Ahí pensás que nosotros deberíamos cobrar un poco más, porque no es solo estar sábado y domingo en la pista, es recuperarte después de semejante fin de semana donde caminás mucho, somos los que más caminamos, esa es otra, somos los que estamos ahí al frente todo el tiempo. Los banderilleros te dan una mano, siempre tienen agua, el público también, pero el tema después es llegar a tu casa. Me ha pasado de levantarme al otro día y sentir un solo tirón de lado a lado del cuerpo porque llegás a las 8 de la mañana al circuito y te vas a las 6-7 de la tarde. Por eso todos los años cuando llega fin de año digo no sacó más fotos y llega la primera carrera y tenés que ir, que fue lo que me pasó también con el accidente del banderillero, el Pato González, el primer pensamiento que tuve yo ya está, no voy más porque no tiene sentido y sin embargo hasta el día antes estuve que voy que no voy y cuando llegó el momento de ir a agarré el bolso y las cosas y fui porque esto lo que nosotros sabemos hacer, sacar fotos en las carreras, es arriesgado, es complicado, pero si no hacemos esto no hacemos otra cosa. ¿Quedarme en mi casa, haciendo qué, tomando mate al sol? Eso lo puede hacer cualquiera, nosotros sacamos fotos en las carreras. Si hay carreras, tenemos que estar, y por eso vamos. Por eso te digo, este año solamente pensaba cubrir Competición Especial 850, pero si me surge algún otro lado y sacar fotos y voy a tener que ir.
– Y se ve muy diferente de un lado y del otro.
Aparte hablás con todos, con los pilotos, con los mecánicos y todo el mundo tiene algo para contarte, todo el mundo opina de algo, vas levantando testimonios y vas formando tu opinión a partir de lo que te dicen y tenés que estar adentro para eso. Patear los boxes, me gusta mucho más la fotografía de boxes porque estás ahí esperando 10, 15, 20 segundos y 1 o 2 minutos hasta que el piloto se pone en la posición perfecta y le tirás la foto. A mí no me gusta hacer posar a los pilotos, me gusta agarrarlos al natural, entonces el abrazo que vas a ver en mis fotos es real, no están actuando, no están fingiendo. Me encanta eso en la fotografía de boxes, eso para mí es paciencia, tratar de pasar desapercibido para qué el piloto no se vea invadido, que sea lo más natural posible. Está bueno porque justamente pilotos y mecánicos siempre me han dicho eso. Creo gran parte del éxito que tuvo la página su momento de más auge allá por 2016-2017 fui de los que empezó a subir fotos de lo que pasa en boxes, ya no era el protagonista el piloto sino que aparecían muchos mecánicos que a su vez subían la foto a su perfil y eso es el mejor premio para mí y que se sientan parte también del espectáculo porque todos hacemos un poquito por eso sacarle al entorno para mí es la parte más linda de mi trabajo.
-De una parte de tu trabajo porque no lo único que haces, también te dedicas a escribir.
-Yo no vivo de la fotografía, pero tampoco de escribir. Soy escritor hace 25 años, antes de ser mecánico y de ser fotógrafo. Es una situación muy distinta, pero tiene cosas parecida porque es algo que haces sólo, escribir lo hacés solo, igual que sacar fotografías, sentarse a corregir también lo hacés y es un laburo que lleva muchísimo tiempo, que lleva muchos años, mucho aprendizaje, mucha práctica. He sacado un libro de novela, tengo dos libros de cuentos y ahora terminé una novela más y otra novela corta para publicar el año que viene. Pareciera que es algo muy distinto, pero también requiere habilidad individual, ese trabajo que tenés que hacer concentrado, por ejemplo al editar, retocar los colores, usás la misma dinámica cuando corregís el texto en la computadora, tomando mate o café, y en ese sentido es bastante compatible. En general lo raro es la mecánica para mí, que la heredé de mi viejo, hago mecánica pesada, llantas, hidráulica, soldaduras y por ahí es por donde más plata me puede llegar a entrar, pero porque escribir una fotografía lo hago porque me gusta, no es gran cosa la plata que se gana, pero siempre ayuda, es un aporte. Y aparte sirve para limpiar la cabeza, el desgaste físico que hacés en el trabajo de la mecánica, luego cambias a la hora de descansar el cuerpo y hacer trabajar la cabeza cuando se escribe. Es una muy buena combinación te digo, es interesante.