La División Delitos Económicos conjuntamente con Comisaría Crespo desarrollaron una intensa investigación, que permitió a la justicia presumir lugares de retorno y asentamiento de la sospechada. Así fue aprehendida por efectivos de San Benito, en la noche de este miércoles.
Con velas, miel y flores, la «Tarotista Isabel» ofrecía trabajos de purificación y sanación espiritual
A sólo 33 días de uno de los más cuantiosos engaños económicos perpetrados en Crespo, la Policía de Entre Ríos capturó a quien se le imputa la autoría material de los dos hechos denunciados y el liderazgo de una banda delictiva.
Fuentes oficiales confirmaron a FM Estación Plus Crespo, que en la noche de este miércoles, personal de Comisaría San Benito procedió a la detención de la «Tarotista Isabel», conforme lo requirió el Fiscal, Dr. Juan Malvasio y lo ordenó la Jueza de Garantías, Dra. Marina Barbagelata. En primera instancia y en base a los informes investigativos elevados, la justicia ofició a la Jefatura Departamental Paraná para que comisione al personal de Comisaría San Benito hasta un domicilio de esa localidad de Paraná Campaña, donde se hallaría la mujer. Al hacerse presente los uniformados, son anoticiados por los residentes de que circunstancialmente la señora buscada se encontraba en una vivienda de calle Guillermo Bonaparte, en jurisdicción de Comisaría 14 de Paraná, en inmediaciones al acceso Norte. Efectivamente allí fue encontrada, siendo trasladada a Alcaidía de Tribunales -previo paso por la División Antecedentes Personales-, quedando alojada a disposición de la magistratura interviniente.
«Isabel» es en realidad un nombre de fantasía utilizado para el ardid. Supo FM Estación Plus Crespo que se llama en verdad Filomena, tiene 65 años, de nacionalidad chilena, datos filiatorios que habían sido individualizados por los investigadores en las 72 horas posteriores a los episodios ocurridos en Crespo.
El 23 de agosto pasado, con una «ilusión de fe», la sindicada logró que dos damnificados se desprendan de más de $400.000 y alhajas. Un hombre y una mujer -casos independientes entre sí- habían acudido a su temporal consultorio, un espacio alquilado en Barrio Jardín de esta ciudad. Tras varias sesiones, ella les pidió a los clientes sus máximos valores personales, bajo la promesa de devolución después de una bendición, para mejorar la suerte de los consultantes. Con el dinero y las joyas en mano, la tarotista huyó.
Una ardua y eficaz labor investigativa de la División Delitos Económicos conjuntamente con Comisaría Crespo, hizo que en pocos días -más precisamente entre el lunes 26 y martes 27-, la justicia cuente con una reconstrucción de los hechos, implicando la debida individualización de los partícipes y del vehículo en el que se movilizaban. Según determinaron los pesquisas, la tarotista operó junto a familiares: una persona que supuestamente podría ser la hija, de unos 40 a 50 años; dos masculinos, de los cuales uno podría ser la pareja de esta hija y el segundo un hijo de esta persona adulta mayor; presentando cada uno de ellos un rol específico a la hora de perpetrar los engaños económicos.
Las averiguaciones posibilitaron establecer que la mujer había estado radicada hasta 2003 en San Benito, para luego regresar a Chile y volverse a nacionalizar. Los servicios que ofrecía hizo que este 2019 la encuentren nuevamente en suelo entrerriano, aunque producto del rastreo local, se pudo saber que ni bien acaecidas las presuntas estafas en Crespo, la tarotista hizo paso por el túnel subfluvial, en dirección a Santa Fe. La presunción de regreso quedó latente y de hecho, se concretó, pudiendo la polica apresarla en las últimas horas.
Ya en el primer fin de semana con posterioridad a los hechos denunciados, la división especializada trazaba hipótesis cuya certeza se confirmó con el correr de las horas.