La trágica muerte de Sheila, la nena de 10 años hallada asesinada en la casa de sus tíos en San Miguel (Buenos Aires), tuvo réplicas en Entre Ríos por el pasado de su familia en la provincia.
Su padre, Juan Carlos Ayala, fue inquilino tiempo atrás de una familia que tiene casas y departamentos en San Salvador.
Junto a él vivían su esposa Yanina y la propia Sheila, en una pequeña vivienda de calle Vuelta de Obligado, en el Barrio Tres Focos.
Al parecer, luego del nacimiento de su hijo menor, la mujer se fue de la casa y Ayala se quedó a vivir en San Salvador.
Luego, obtuvo la tenencia de la nena y se volvió a Buenos Aires. Fuente: Reporte Cuatro.