Un joven de 18 años tuvo en vilo la zona de Maya y Churruarín. Efectuó disparos y luego intentó matarse
Buen estado. La 11,25 o la 45 fue encontrada escondida en el baño del alterado joven.
Escenas de tensión y situaciones límites se vivieron en la tarde de este viernes en Churruarín y Gobernador Maya de Paraná. Un joven de 18 años efectuó disparos con una 45 a los vecinos, y los mismos enojados intentaron hacer justicia por mano propia. Ante esto el afectado muchacho amenazó con quitarse la vida haciendo explotar una garrafa.
Personal de la comisaría séptima y del 911 de Paraná fue alertado de una serie de incidentes en Maya y Churruarín, en la zona este de la ciudad. Allí se constataron corridas, enojos, gritos y amenazas de parte de un joven que se encontraba desestabilizado emocionalmente.
Se supo que este muchacho de 18 años, un rato antes había efectuado varios disparos con una 11,25 (más conocida como la vieja 45) a varios vecinos. Afortunadamente no hubo lesionados.
Sin embargo el nivel de agresiones creció y varios de los vecinos decidieron rodear la casa del autor de la balacera con intenciones de «ajusticiarlo».
Los uniformados trataron de mediar en el conflicto, pero se llegó a un momento de mayor tensión cuando desde el interior de la vivienda el joven amenazó con quitarse la vida, descerrajándose un disparo o bien haciendo explotar una garrafa de 10 kilos.
Las deliberaciones permitieron al menos que el afectado saliera a la vía pública y de ese modo pudo ser reducido por los policías.
La madre del afectado autorizó a los uniformados a ingresar a la casa y allí se encontró en el baño un arma de fuego calibre 45, con cartuchos de 11,25.
También se puso en resguardo una garrafa de 10 kilos y un encendedor.
Anoticiado de la resolución del conflicto, el fiscal en turno Cristián Giunta dispuso efectuarle al joven el examen de dermotes y su posterior traslado a la Alcaldía por el delito de Portación Ilegitima de Arma de Guerra y Abuso de Arma. Fuente: Uno.