Con perros, Prefectura y toda la Policía, sigue la búsqueda del padrastro violador

El hombre, que está acusado de embarazar a su hijastra de 16 años, tiene orden de captura y durante todo el fin de semana se realizaron rastrillajes en la zona norte de Gualeguaychú. Se dedica a la caza y a la pesca y conoce mejor que nadie la zona donde se esconde.

Durante el sábado, domingo y lunes, la Policía de Gualeguaychú encabeza la búsqueda del hombre de 32 años que fue señalado por la propia adolescente como el responsable de los reiterados abusos sexuales que sufrió durante varios años.

El caso estremeció a la opinión pública, que no sale del asombro y del interrogante sobre cómo pueden ocurrir este tipo de hechos. Lo más lamentable de todo es que los abusos intrafamiliares son mucho más frecuentes de lo que uno imagina, no distinguen clases sociales y se denuncian prácticamente uno por día en los Tribunales de Gualeguaychú.

En la actualidad, la detención de este sospechoso es la principal preocupación de la Policía Departamental. Para eso, se ha recargado a un gran número de funcionarios, dependientes de las distintas comisarías y de las divisiones Investigaciones y Toxicología, para dar con el lugar donde se esconde.

Hay una estimación donde se guarece y es una zona muy conocida por él. Este hombre se dedica a la caza y a la pesca y su lugar de trabajo es la zona del río Gualeguaychú aguas arriba. El terreno es muy complicado por tratarse de una zona de monte, que este sujeto conoce mejor que nadie.

Durante todo el fin de semana, la Policía – además de todo el personal – dispuso el rastrillaje con dos perros y el sábado por la noche se estuvo muy cerca, pero la condición del terreno y la creciente complicaron la situación y los canes perdieron el rastro.

También se incluyó a Prefectura en esta búsqueda porque se sabe que el acusado se traslada en embarcación. Es común que aquellos que se dedican a este tipo de actividad utilicen embarcaciones que muchas veces no son propias, que están a la vera de la costa, pero como si fuera parte de un código interno, las usan y luego las dejan en lugares específicos ya conocidos entre “colegas”.

La Policía cree que está encaminada y que hay indicios que confirmarían que este hombre solicitado por la Justicia para hacer frente a una denuncia de “abuso sexual con acceso carnal, agravado por la condición de conviviente”, se escondería en esta zona de monte. Fuente: El Día.

 

El terrible caso

La víctima tiene 16 años y afronta un embarazo de cinco meses. El responsable sería este hombre de 32 años que formó pareja con su madre, con la que tuvo dos hijos. Según pudo saber ElDía, los abusos fueron reiterados y perduraron a lo largo de más de dos años, pero fue recién la semana pasada cuando todo salió a la luz.

Ella acusaba distintos malestares físicos y su madre, como haría cualquier otra mujer en estas condiciones, decidió llevar a su hija al centro de salud de su barrio. Allí la revisó una médica y tras realizar una ecografía constató el embarazo de cinco meses.

Al transmitir esto a la adolescente, la menor comenzó a negar ese embarazo y aseguraba que ello era imposible porque afirmaba no haber mantenido nunca relaciones sexuales. La víctima no aceptaba su estado y la médica optó por aconsejarle una entrevista con un psicólogo.

Luego, ambas mujeres regresaron a la casa y la madre trató de dialogar y calmar a su hija, porque se encontraba muy angustiada y aseguraba que ella nunca había tenido relaciones sexuales. Tras esto decidió contarle a su pareja lo que estaba sucediendo, pero la reacción del hombre llamó la atención. Primero se hizo el desentendido y luego se retiró de la casa sin mencionar a dónde iba y sin llevarse nada consigo.

La incertidumbre de la mujer era cada vez mayor y decidió volver a la habitación de la adolescente para desentrañar lo que ya comenzaba a sospechar. Fue ahí cuando recibió la peor noticia. Su hija le confirmó que el hombre se había ido de la casa porque era él quien la violaba desde hacía tiempo.

El relato de la menor fue un balde de agua fría para la mujer, aunque no dudó un solo instante en hacer público lo sucedido. Junto a ella se presentó en la Comisaría de Minoridad y Violencia Familiar y denunció al supuesto autor.

Según pudo saber ElDía, la mujer requirió que se tomen las medidas necesarias para que el hombre no vuelva a acercarse al domicilio ni ver a los hijos que tiene en común con la madre de la víctima, pero además puso en alerta a las autoridades que se trata de un hombre violento, que cada vez que se enojaba la agredía físicamente con patadas en todo el cuerpo o rompía los muebles de la casa.

Desde entonces es buscado por la Policía.