Actualmente se está vendiendo soja a un precio que se ubica un 25% (en promedio) por encima de los valores de abril/mayo y casi un 10% de los de agosto.
El Informe de Coyuntura del IERAL de la Fundación Mediterránea de esta semana aborda el tema de los mercados internacionales de granos, en especial, el movimiento de los precios de la soja que si bien cerró en baja esta semana, aún sostiene un precio 25% por encima de los valores abril/mayo y casi un 10% más que los de agosto.
“Todo indicaría que esta escalada en los precios responde más a presión de demanda que a restricción de oferta y que se genera básicamente por una aceleración de las importaciones chinas en los últimos meses (sin desconocer que hay otros países del sudeste asiático, más chicos, que también están empujando). En el caso de la soja, las importaciones del gigante promediaron 10,3 millones de toneladas mes en el trimestre junio agosto, un flujo que es record histórico (y que anualizado asusta porque lleva a las compras a 123,6 millones de toneladas, equivalente a 2,3 cosechas argentinas)”, detalla el informe.
La pregunta del millón es saber hasta cuándo China va a sostener este ritmo de importaciones de soja, que llevaron al valor del porto a los máximos de los últimos dos años, acercándose en algunas jornadas a los 400 u$s/tn.
“Desde otra perspectiva, la duda reside en los factores que están por detrás de la aceleración de las compras chinas: cuánto de anticipación y/o acumulación de reservas y cuánto de expansión esperada en el consumo interno”, se pregunta Juan Manuel Garzón, encargado de la editorial del IERAL de la Fundación Mediterránea.
Y se responde: “Si se atiene a las proyecciones del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, habría un mix, por un lado, un crecimiento interesante del consumo interno en este y el próximo año y, por el otro, una acumulación de existencias finales, que se está dando en esta campaña pero que perdería intensidad el año entrante (los stocks finales bajarían de 3,0 a 2,8 meses de consumo equivalente)”.